Cuatro niños mueren al caer el techo en un polideportivo en Sant Boi de Llobregat

Con la muerte de este niño ya son cuatro los menores de entre nueve y doce años que han fallecido a consecuencia del hundimiento de la cubierta del campo municipal de béisbol de Sant Boi, provocado por el fuerte temporal de viento que azota Cataluña, según han informado a Efe fuentes de los Bomberos de la Generalitat.

En el accidente,que se ha producido sobre las 11.15 horas, han resultado heridas otras nueve personas, entre ellas dos monitores deportivos.

Otro de los siete menores heridos permanece ingresado en estado muy grave en el hospital de Sant Joan de Déu.

Una veintena de niños se encontraban entrenando al aire libre en el campo de béisbol de Sant Boi cuando, debido a las fuertes rachas de viento, que han superado los cien kilómetros por hora, han decidido refugiarse bajo el pabellón.

El viento ha arrancado el techo metálico de la instalación, lo que ha provocado el derrumbe de las paredes, que han sepultado a trece personas.

Numerosos equipos de emergencia, entre ellos seis ambulancias y otras tantas de los Bomberos de la Generalitat, se han desplazado hasta el lugar del suceso, al que han acudido también muchos padres angustiados para conocer la situación de sus hijos.

El conseller de Interior, Joan Saura, ha destacado la "modélica" actuación de los servicios de emergencia, aunque ha agradecido especialmente la colaboración que han prestado los vecinos, ayudando a policías y bomberos a sacar escombros, a buscar personas y a atender a los heridos.

Las administraciones han habilitado un punto de asistencia psicológica a los afectados en el centro cívico Can Planes de Sant Boi.