Todos a la cárcel. La jueza de guardia de Inca ha ordenado este sábado el ingreso en prisión del hombre acusado de matar a un joven que entró a robar marihuana en su finca en Inca y de los otros tres sospechosos de participar en el atraco. La magistrada ha tomado esta decisión tras tomar declaración a las cuatro implicados, que han ofrecido versiones contradictorias sobre lo sucedido. El dueño de la finca está acusado de un delito de homicidio y los otros tres, de robo con violencia e intimidación en casa habitada.

Los cuatro implicados han sido trasladados esta mañana por la Guardia Civil a los juzgados de Inca. El autor del crimen y dos de los presuntos ladrones fueron detenidos el mismo día de los hechos, mientras el otro intruso se entregó el viernes al saber que estaba siendo buscado.

Los hechos ocurrieron el jueves, sobre las ocho de la tarde, en una finca ubicada en el Camí de Can Batle, en las proximidades de Inca. Cuatro hombres se introdujeron en la propiedad con la intención de robar varias plantas de marihuana que el dueño cultivaba allí. Según parece, llevaban al menos un machete para cortar los tallos.

Los ladrones cortaron dos plantas, de la aproximadamente media docena que había en la finca, y las cargaron en un coche. Pero en ese momento fueron sorprendidos por el propietario, Sebastián M.G., de 49 años, que salió de la casa y se enfrentó a ellos. Al parecer durante el forcejeo se hizo con el machete que llevaban los ladrones e hirió a dos de ellos. Jaume L.R. sufrió gravísimas lesiones en el pecho, la cabeza, el brazo y la espalda. Otro de sus cómplices sufrió heridas leves.

Los intrusos huyeron, pero el que estaba malherido no llegó muy lejos. Alcanzó a salir de la finca a través de un agujero en la valla y se desplomó en medio del camino. Falleció poco después.