Investigación

Un preso borracho desata la alarma en la refinería de Castellón al colarse dentro con un coche y estrellarse

El accidente ocurrió de madrugada y el recluso, que dio un tasa de alcohol de 0,8, afirma que iba de regreso a la prisión y se equivocó de carretera

Imagen aérea de la refinería BP en el Grao de Castellón.

Imagen aérea de la refinería BP en el Grao de Castellón. / Levante-EMV

Un recluso de permiso que debía regresar el pasado sábado por la noche al centro penitenciario Castellón II, en Albocàsser, unos 60 kilómetros al norte de Castellón, hizo saltar todas las alarmas al colarse en la refinería de BP, en el Grao, a toda velocidad con un coche y acabar estampándose tras reventar una de las ruedas. No solo dio positivo en el test de alcoholemia, sino que, además, explicó a los policías y al personal de seguridad que en realidad creía estar en la cárcel y que se había equivocado de carretera.

El rocambolesco episodio, protagonizado por un hombre de nacionalidad rumana de 42 años, se produjo en la noche del sábado pasado, sobre las 22.30 horas.

El hombre entró con su vehículo a gran velocidad en uno de los sectores de la refinería, que tiene el acceso restringido al personal autorizado por evidentes razones de seguridad. Sin embargo, en esa entrada, la barrera de seguridad estaba abierta, porque estaba en proceso de reparación, lo que ayudó al preso a mantenerse en el error, así que, acuciado por la hora, solo paró cuando se estampó.

Tras acceder al interior a gran velocidad, obviando las señales desesperadas de los vigilantes que trataron de darle el alto, continuó circulando por el interior hasta que llegó a un pequeño paso elevado sobre un entramado de tuberías de conducción de combustible y acabó estrellándose y reventando una de las ruedas de su vehículo. Solo entonces se detuvo.

Llegar a tiempo a la cárcel

Instantes después llegaron los primeros agentes de la Policía Nacional, alertados por el personal de seguridad de la planta petroquímica, que identificaron al sospechoso. Él mismo les relató que era interno de la prisión de Albocàsser, que estaba de permiso y que debía reintegrarse al centro penitenciario esa noche, antes de las 23.00 horas.

Con las prisas de llegar a tiempo y el grado de alcohol en sangre –dio 0,8 gramos por litro de aire expirado, dos décimas por encima del límite entre sanción administrativa y delito–, se equivocó de carretera y acabó colándose involuntariamente en el recinto de una instalación altamente sensible como es la refinería, lo que activó la alerta.

La Policía Nacional requirió a la Policía Local para que enviase un vehículo dotado con pruebas evidenciales para someter al conductor a las pruebas de detección de alcohol y drogas. Una vez confirmado el positivo, fue detenido y trasladado a la comisaría de Castellón antes de ser puesto a disposición judicial.

Además de los delitos contra la seguridad vial, se le imputará otro de daños por los desperfectos causados con el vehículo, y posiblemente la junta de tratamiento de la prisión le retire beneficios por su no reincorporación a tiempo y por los hechos que han derivado en su detención.