Astronomía

Múltiples y misteriosos objetos interestelares han ingresado a nuestro Sistema Solar

Los investigadores creen que podría haber una población constante de objetos interestelares en órbitas cercanas a la Tierra

Una imagen obtenida por el telescopio Hubble del cometa interestelar 2IBorisov, en octubre de 2019.

Una imagen obtenida por el telescopio Hubble del cometa interestelar 2IBorisov, en octubre de 2019. / Créditos: NASA, ESA y D. Jewitt (UCLA).

Pablo Javier Piacente

Un nuevo estudio sugiere que además de Oumuamua, en 2017, y el cometa 2I Borisov, en 2019, es probable que muchos otros objetos interestelares (ISO) hayan sido “capturados” en algún momento por nuestro Sistema Solar, aunque el problema principal para su detección y análisis es que estos visitantes alienígenas no se quedan por mucho tiempo en esta región del cosmos.

En un artículo científico publicado recientemente en Arxiv, los investigadores Diptajyoti Mukherjee, Hy Trac, Amir Siraj y Avi Loeb afirman que los casos de Oumuamua y 2I Borisov, los únicos objetos interestelares (ISO) detectados y confirmados hasta el momento, no son hechos aislados: a lo largo de la extensa historia del Sistema Solar, otros ISO nos habrían visitado. Incluso creen que una población permanente de objetos interestelares podría estar oculta en áreas relativamente cercanas a nuestro planeta.

Objetos interestelares cerca de la Tierra

La aparición en 2017 del misterioso Oumuamua, una extraña estructura alargada en forma de cigarrillo puro, generó un revuelo mundial y desató una serie de teorías y especulaciones, que se extienden hasta hoy. Algo similar sucedió con el cometa 2I Borisov, detectado en 2019. Por el momento, se trata de los únicos objetos interestelares (ISO) confirmados por los astrónomos como fugaces visitantes de nuestro Sistema Solar. ¿Pero son realmente los únicos?

Aunque los ISO son extraños y misteriosos, el Sistema Solar es antiguo y es probable que muchos de estos objetos lo hayan visitado en algún momento. Los astrónomos sostienen que algunos de estos objetos interestelares pueden ser “capturados” en órbitas solares, ubicándose ocasionalmente dentro de los límites del Sistema Solar, debido a la atracción gravitacional de nuestra estrella. 

Sin embargo, el nuevo estudio va más allá: analiza más de cerca la captura de objetos interestelares y prueba la idea de que algunos ISO podrían capturarse en órbitas cercanas a la Tierra, en lugar de órbitas solares. Los investigadores responsables de este nuevo trabajo dicen que podría existir una población constante de ISO en la órbita cercana a la Tierra.

Fugaces y difíciles de detectar

De acuerdo a un artículo publicado en Universe Today, las únicas imágenes que obtenemos actualmente de otros sistemas estelares son de sus estrellas o tenues registros de algún exoplaneta. En ocasiones, los astrónomos detectan discos de escombros y otras características, pero los detalles finos en torno a estos sistemas alienígenas no pueden obtenerse de esta forma. 

"Los objetos interestelares presentan un mecanismo único para investigar la formación y evolución de los sistemas planetarios, incluido el nuestro", expresan los autores en su estudio. En consecuencia, identificar otros ISO y llegar a analizar sus características sería la forma ideal de obtener información sobre otros sistemas solares, descubriendo cómo se forman y evolucionan.

Las teoría son múltiples: investigaciones recientes indican que el nuevo Observatorio Vera Rubin, próximo a entrar en funcionamiento, podría encontrar hasta cinco ISO por año, y que la Nube de Oort, una región esférica de objetos transneptunianos, podría contener más ISO que objetos nativos del Sistema Solar

El problema es que estos visitantes no se quedarían el tiempo suficiente en nuestro entorno cósmico como para poder ser estudiados. Otra investigación sugiere que los rayos cósmicos podrían erosionar a la mayoría de los ISO y destruirlos, una suerte similar a la que correrían otros ISO atraídos hacia Júpiter y también pulverizados. 

Representación artística de Oumuamua.

Representación artística de Oumuamua. / Créditos: ESO/M. Kornmesser & nagualdesign.

Pequeños pero cercanos

Pero los datos obtenidos en el nuevo estudio muestran cómo los ISO podrían “capturarse” en órbitas cercanas a la Tierra, aunque buscarlos inicialmente en estas regiones podría resultar infructuoso. Para los científicos, una posibilidad sería que los objetos interestelares se “oculten” en zonas cercanas a los Centauros, pequeños cuerpos del Sistema Solar con órbitas inestables, debido a sus interacciones con los planetas gigantes.

En consecuencia, las órbitas cambiantes que seguirían los objetos interestelares podrían facilitar su detección en distintas áreas del Sistema Solar, e incluso ser capturados por la atracción gravitacional del sistema Tierra-Luna, hasta conformar una especie de “población” constante de estos objetos en cercanías de nuestro planeta. Específicamente, como “compañeros” de los llamados objetos próximos a la Tierra (NEO, según las siglas en inglés). 

A pesar de esto, los investigadores aclaran que muchos de estos objetos serían extremadamente pequeños, nada posible de comparar con Oumaumua o el cometa 21 Borisov. La población estaría dominada por ISO de aproximadamente 1 metro de diámetro, ya que no existe ninguna posibilidad de que un objeto de mayores dimensiones pueda ser atraído naturalmente hacia nuestro sistema.

Referencia

Close Encounters of the Interstellar Kind: Exploring the Presence of Interstellar Objects in Near Earth Orbit. Diptajyoti Mukherjee, Amir Siraj, Hy Trac and Abraham Loeb. Arxiv (2023).