Laporta ha comparecido ante los medios de comunicación, tras una reunión de junta que ha durado unas seis horas y medias, junto a los dos vicepresidentes que le quedan, Jaume Ferrer y Alfonso Godall, mientras que los ocho restantes se han sentado frente a él en la sala de prensa del Camp Nou.

El presidente ha anunciado que provisionará las bajas en la junta (cuatro como mínimo), y ha vuelto a recordar que siguen entendiendo que el resultado de la moción de censura "fue un voto de castigo.

El mandatario barcelonista defendió que por sentido de la responsabilidad ha buscado "la cohesión de la junta", pero se ha lamentado de que no ha sido posible "por diferencia de criterios por cómo debíamos de continuar después del voto de censura".