Galliani precisó, según los medios locales, que el futbolista podría reunirse ya con sus compatriotas el próximo 22 de julio en Ginebra (Suiza).

El Milán, añadió Galliani, ha decidido, así, respetar los "compromisos asumidos anteriormente por el jugador, que en esos momentos no tenían ningún vínculo con el club".

"Lo dejaremos ir a la Olimpiada", precisó Galliani, que añadió que no hubiera sido "ni siquiera legítimo" prohibirlo.

Galliani apostilló que "tal vez si hubiera sido ya jugador nuestro no se lo habríamos mandado, como ha sucedido con Kaka y Bonera".