Por encima de discusiones sobre si el nuevo Unicaja será o no un equipo competitivo -algo imposible de definir a estas alturas del verano- lo cierto es que tras el ´no´ de Garbajosa a la oferta millonaria planteada por el club de Los Guindos, por primera vez desde el verano de 2003 el Unicaja no tendrá un gran fichaje en la pretemporada.

Omar Cook, Thomas Kelati -todavía sin confirmación oficial-, Robert Arhibald y Vitor Faverani serán las caras nuevas para la grada cajista en la temporada que está por venir. Eso sí, la llegada más mediática será la del banquillo, con la presencia de Aíto García Reneses (el mejor entrenador español de los últimos tiempos).

Los nuevos nombres, desde luego, no tienen nada que ver con los fichajes ´galácticos´ de las últimas pretemporadas. Una filosofía de trabajo que, por otro lado, sólo ha repercutido en un título de Copa y otro de Liga, a pesar de los fuertes desembolsos económicos planteados durante cinco veranos consecutivos.

Walter Herrmann fue el primer gran fichaje de la nueva era verde. El alero argentino llegó el verano de 2003 a Málaga después de ser el MVP de la Liga ACB en el Fuenlabrada. Le costó cogerle el ritmo al club, pero participó de los dos grandes éxitos antes apuntados. Lo querían el Tau y el Barcelona, pero el entonces presidente, Ángel Fernández Noriega, fue más listo que nadie para vestirlo de verde cajista.

Un año después se logró el refuerzo de Jorge Garbajosa. El madrileño lo había ganado todo en Italia. El Benetton tenía problemas económicos y decidió venderlo. Lo querían el CSKA, el Tau, el Barça... Scariolo pesó lo suyo en la negociación y el también ex presidente Rafael Fernández hizo el resto.

El verano de 2005 fue el del fichaje de Marcus Brown. El club había atado a Trajan Langdon, pero el americano decidió dar marcha atrás e irse al CSKA, dejando al Unicaja ´tirado´. Otra buena negociación de la pareja Fernández-Scariolo dio con Brown en Málaga. Lo había ganado todo en Francia, Turquía y Rusia. Y en su primer año ayudó al Unicaja a hacerlo también campeón de Liga.

La pretemporada de 2006 fue dura. Garbajosa se fue a la NBA y el club pareció quedar cojo. Carlos Jiménez era en aquellos días la joya del mercado. El Real Madrid estaba ´loco´ por ficharlo, pero otra vez el Unicaja se llevó el gato al agua.

El verano pasado fue el turno de Marcus Haislip. El ala-pívot americano había sido la sensación de la Euroliga en las filas del Efes Pilsen. Media Europa suspiraba por él. Incluso algunas franquicias pensaron en incorporarlo. Pero mediado el mes de julio el club verde anunció su contratación.

Este verano se ha intentado repescar a ´Garba´. Pero no era una prioridad. Era una guinda al pastel que ha ideado Aíto con jugadores que él conoce. La pasada campaña fichó para su DKV a Mallet (del Colonia), a Jagla (del Etosa) y a Moiso y Sonseca, dos jugadores de relleno en el Madrid. Es cierto que tenía a Rudy -y en menor medida a Ricky-, pero el resto eran Laviña, Flis, Ribas o Barton. Ese equipo fue campeón de Copa, subcampeón de la Liga Regular y campeón de la ULEB. Sin duda, el beneficio de la duda, con Aíto, está más que justificado. Tiempo al tiempo.