El caballero del fútbol, con nombre de emperador romano y apellidos que han marcado la época más dorada del Málaga, quiere volver a revivir aquellos momentos de éxito en la Liga y en Europa, pero esta vez desde el banquillo. De momento, junto a Antonio Tapia, sienta las bases de un proyecto serio donde los haya. El balón dio paso al vídeo. Es Dely Valdés.

-¿Qué ha cambiado entre el Dely Valdés futbolista y el entrenador?

-Simplemente, el rol de pasar a ver el fútbol desde otro punto de vista. Más complejo. Son dos funciones diferentes.

-¿Hasta qué punto es complicado ser entrenador?

-Cuando se es futbolista, debes estar bien físicamente de cara al siguiente partido. El entrenador debe planificar el trabajo de toda la semana, estar pendiente de veinte futbolistas, pensar en los rivales, etcétera.

-¿Cómo se produce el momento de la llamada del Málaga? ¿Dónde estaba? ¿Quién le llama?

-Dejé las puertas abiertas en mi último año como jugador malaguista, en la temporada 2002/03. Me ofrecieron renovar por un año más, pero llevaba años pensando en dejar el fútbol y así lo hice tras acabar en el Nacional de Montevideo. Llevo tres años como entrenador. Yo estaba en Panamá, me llamó Fernando (Sanz) y mucha culpa de que ahora esté aquí la tiene él.

-¿Tenía otras ofertas?

-Tuve una oferta al principio de este año para entrenar en el área de la CONCACAF (Centroamérica). Pero la desestimé.

-¿Es consciente Dely Valdés de que es un ídolo en Málaga?

-No sé si un ídolo, pero sí que dejé recuerdos muy bonitos, sobre todo en el último año, cuando nos clasificamos para la Copa de la UEFA y llegamos lejos -a cuartos de final-. En la Liga fueron tres años de menos a más, marcando un número importante de goles. También he dejado recuerdos como persona. Este reconocimiento lo valoro mucho más.

-¿La confianza y el talante de usted con los jugadores, al haber sido futbolista, es el ingrediente perfecto para equilibrar la excesiva seriedad de Antonio Tapia en algunos momentos?

-De Antonio (Tapia) conocemos su trayectoria, su experiencia y que tiene capacidad para manejar un vestuario. Uno debe ser muy profesional y Antonio lo es. He tenido muchos entrenadores estrictos y los resultados le han acompañado. Eso es muy bueno. Por la parte que me toca, al haber jugado muchos años, sé lo que es crear un buen ambiente en el vestuario. Eso ayuda a que la cosa se sobrelleve mucho mejor.

-¿Qué es lo que más le gusta de este Málaga?

-Todavía la plantilla no se ha cerrado del todo. Pero desde el primer día he visto un ambiente muy positivo. El grupo es muy trabajador. Hasta la fecha, nadie ha bajado los brazos. Los chicos soportan bien la carga de trabajo. Hay muchos ánimos en cada sesión, más allá del cansancio, y eso ayuda al cuerpo técnico a trabajar con más ganas.

-¿Ve alguna similitud con el Málaga de su época?

-Es pronto. Estamos en la etapa de adaptación. La mitad de la plantilla son nuevos. Con los que hay y si llegan los que quiere Antonio -Juanma, Miguel Ángel, Adrián y un mediocentro cuyo nombre no ha trascendido-, se podrá realizar un buen campeonato, que es lo que todos deseamos.

-¿Con qué jugadores de aquella sigue en contacto, al margen de Fernando Sanz?

-Ya mantenía contactos con Fernando Sanz y con Marcelino Torrontegui -masajista-. Con Darío Silva hablo en algunas ocasiones, como también con ´Gato´ Romero. En alguna ocasión he hablado con Koke. Fue un equipo que hizo cosas muy buenas y que la gente recuerda con mucho cariño.

-¿Qué otras aficiones tiene al margen del fútbol?

-Soy muy casero. Ya lo era como futbolista. Me gusta estar con la familia, escuchar música, y sólo en ocasiones salgo a cenar.

-¿Qué objetivo personal se marca para esta temporada?

-Intentar que al final de la campaña se hayan hecho bien las cosas. Que el Málaga siga en la categoría y que se consolide.

-¿Se ha afincado ya en Málaga con la familia?

-Sí. Ya están todos en Málaga. Hemos escogido Guadalmar para vivir. Yo llegué un mes antes, y luego se sumaron mis hijos, dos varones de 12 y 2 años y una chica de 11.

-¿Qué tiene Málaga que no tenga otras ciudades del mundo?

-El clima es espectacular. Estamos en la Costa del Sol, no estoy descubriendo nada. Cuando me salió la oportunidad de venir para acá ni me lo pensé. Sabía dónde venía. Conozco la ciudad, la gente y es como llegar a mi segunda casa. No me importaban demasiado las condiciones económicas. Y me daba igual si el equipo estaba en Primera o Segunda.