El Caja Laboral Baskonia logró un ajustado y sufrido triunfo en la Liga Endesa ante el Real Madrid (67-66), en el estreno del nuevo Buesa Arena con su aforo para 15.504 espectadores.

El triunfo que aferra a los vitorianos a la pelea por la segunda posición no estuvo exento de sufrimiento hasta los segundos finales porque Sergio Llull tuvo dos balones que no quisieron caer en la cesta baskonista y que pudieron haber dado el triunfo a los de Laso.

Llull se la jugó primero con una entrada a canasta en la penúltima acción y, con solo ocho décimas, la jugada de pizarra diseñada en el banquillo no culminó con una canasta que repelió el aro de Caja Laboral.

El partido en el Buesa Arena pasará a la historia del baloncesto nacional por ser el que mayor asistencia de espectadores ha tenido al establecer el tope en los 15.504 espectadores.

A la fiesta de inauguración del mastodóntico nuevo Buesa Arena faltaron San Emeterio por el bando local y Carroll por el cuadro madrileño aquejados de una pubalgia y una pancreatitis, respectivamente.

El visitante Nicola Mirotic hizo la primera canasta del ampliado pabellón vitoriano, con un triple al medio minuto, y ahí desapareció el equipo de Pablo Laso que en los siguientes ocho no volvió a ver el aro asfixiado por la férrea defensa baskonista: 11-3.

Dos tiros libres de Felipe Reyes, la primera canasta de dos del pívot cordobés y su habitual batalla bajo los aros rompieron el parcial de once puntos seguidos de los vitorianos para llegar al final del primer cuarto doblando Caja Laboral al Real Madrid: 14-7.

Los de Ivanovic plasmaron en la pista la táctica de no dejar jugar al Real Madrid a su velocidad habitual y entorpecer con la defensa las maniobras ofensivas de los de Pablo Laso.

Así se llegó a la máxima renta local, 24-12 en el minuto catorce, pero emergieron Rodríguez en la dirección junto a Mirotic y Velickovic para aupar a los visitantes que, en tres minutos, se situaron a solo cuatro del Baskonia: 28-24.

La aparición de Teletovic cuando más apretó la defensa madrileña terminó con los agobios locales para llegar al descanso con una renta más tranquilizadora (34-26).

Los de Pablo Laso mudaron el aspecto tras el descanso y en los primeros seis minutos endosaron un parcial de 17-8 que remató Suárez con un triple que devolvió de nuevo la ventaja (42-43) al Real Madrid.

Los blancos recuperaron el acierto desde la larga distancia y con el dominio del rebote sometieron en el cuarto con un 24-14 de parcial a Caja Laboral que careció de fluidez e ideas en ataque.

Con dos puntos de ventaja, 48-50, encaró el Real Madrid el periodo definitivo que arrancó con un intercambio de canastas. Salió mejor parado el equipo vitoriano que logró escaparse con siete puntos de ventaja, 61-54 a falta de seis minutos, pero dos triples de Singler y Llull dilapidaron la renta (61-60).

El partido se adentró en una sucesión de tiros libres con abundantes errores por cada bando que mantuvieron la emoción en el marcador y sin que ningún equipo se escapara hasta el minuto final cuando los locales ganaban 67-66.

Carlos Suárez erró un triple y lo mismo hizo Oleson por el cuadro local dejando los últimos veinte segundos al Real Madrid que se jugó el triunfo del partido con una bandeja de Sergio Llull que no cayó en la cesta baskonista.

Tuvo una última ocasión Llull, cuando a falta de ocho décimas la jugada de estrategia en el saque de banda tampoco quiso entrar después de un "alley-hoop" de pizarra que escupió el aro de Caja Laboral.

67. Caja Laboral (14+20+14+19): Prigioni (6), Nocioni (12), N. Bjelica (10), Teletovic (8), Lampe (10)-cinco inicial-, Ribas, Heurtel (5), Oleson (8) y M. Bjelica (8).

66 Real Madrid (7+19+24+16): Llull (16), Pocius (6), Suárez (3), Mirotic (11), Begic (6) -cinco inicial-, Reyes (5), Rodríguez (3), Tomic, Singler (11) y Velickovic (5).

Árbitros: Arteaga, García Ortiz y Martínez Díez. Sin eliminados.

Incidencias: Vigésimo octava jornada de Liga Endesa disputada ante 15.504 espectadores en el Buesa Arena de Vitoria en el partido que se convierte en récord histórico de asistencia en la competición. El Buesa Arena estrena su nuevo aforo tras las obras de ampliación.