El español Fernando Alonso (Ferrari) considera que la batalla por el título mundial de Fórmula uno la perdió ya en julio pasado, cuando el paquete de novedades preparado por la escudería italiana no dio el resultado apetecido.

"Creo que el problema fue nuestro desarrollo. No nos adaptamos al neumático o no dimos los pasos que habíamos previsto. Llegamos en julio con buenas novedades sobre el papel que no dieron resultado en la pista y eso detuvo la mejora en el rendimiento que teníamos que haber conseguido", comentó Alonso en declaraciones que recoge Autosport.

El piloto español, dos veces campeón mundial, todavía tiene posibilidades matemáticas de ganar el título, pese a los 90 noventa puntos que le separan del líder, el alemán Sebastian Vettel, que ha ganado las cinco últimas carreras.

El título, a su juicio, se le escapó en julio, en torno al GP de Gran Bretaña, y los cambios introducidos por Pirelli en los neumáticos, volviendo a la estructura del 2012, terminó de arruinar las posibilidades de Ferrari.

"Es evidente que algunos equipos perdieron competitividad y que otros mejoraron un poco su rendimiento, como Sauber. Pero Pirelli tuvo que hacer esos cambios porque los neumáticos reventaban, no fue una decisión para favorecer a uno u otro equipo. Era sólo para seguir compitiendo. Nosotros no podíamos hacer nada", advirtió.

Domenicali

El director deportivo de Ferrari, Stefano Domenicali, declaró que los problemas de la escudería este año se deben a "no haber mejorado el coche y haber perdido puntos en la primera parte de la temporada" y consideró que cambiarle a él no garantiza la victoria al día siguiente.

"El caso del fútbol, que si no ganas echan al entrenador, no es el caso de Ferrari. No se cambia a Domenicali y mañana ganas. Claro, mi jefe puede hacerlo; si lo hace, agradeceré siempre haber estado en Ferrari. Pero hay un dicho en Italia que dice: 'Cuando dejas la carretera que conoces, la otra puede ser peor'", afirmó.

En la primera parte de una entrevista con el diario As, Domenicali explicó que intenta "dar los mejores instrumentos a las personas que trabajan con el coche, diseñan el coche, las elecciones de los pilotos, patrocinadores, hacer funcionar el sistema".

"El problema no es Domenicali. Domenicali es una persona que es el primero que entra a trabajar y el último que sale, se dedica a que no les falte de nada a sus hombres, y en estos años creo que hemos construido una base de un equipo que debe ser el mejor de todos. Si hubiésemos ganado en 2012 tampoco Domenicali habría sido un fenómeno, sólo habría hecho su trabajo, pero si nos echan en la primera curva, no hay que cambiar a Domenicali, y no lo digo por mí o porque sea yo, es un hecho", comentó.

En su opinión hay "dos factores" que han sido determinantes para el desarrollo del presente campeonato, "haber perdido puntos en la primera parte de la temporada, (porque podíamos haber hecho más), y luego no haber mejorado el coche, hacerlo competitivo como esperaba y como había pedido a los técnicos".

"Por desgracia hemos tenido, en algunos casos como Silverstone o Alemania, desarrollos del coche que en vez de mejorar, empeoraban el monoplaza. En un mundo así de competitivo, no se vive sólo con el nombre", añadió.

Sobre la cuarta temporada en blanco de Fernando Alonso en Ferrari, en la que es segundo del Mundial con 77 puntos menos que el líder, el alemán Sebastian Vettel (Red Bull), Domenicali habló de la "poca racionalidad de italianos y españoles" que auguraban un nuevo título con su incorporación.

"Anteponemos la pasión. Cambiar por cambiar, vuelve interesante la noticia, que vive de emociones. Pero el cambio trae discontinuidad y ésta puede volverse peligrosa. Y hablando de esto: cuando se habla de pilotos, cuántas veces he leído en el pasado: 'Hay que cambiar a Felipe'. Ahora leo: 'Felipe se tiene que quedar'. ¿Pero en qué quedamos? Un poco de racionalidad". planteó.

Preguntado sobre si ha contemplado la posibilidad de irse de la escudería, Stefano Domenicali afirmó que ha "nacido en Ferrari".

"Me ha dado tanto como yo he dado a esta familia. Se hace por pasión, porque uno cree en lo que hace, y ahora también lo hago para demostrar a todos aquellos que se toman el placer de ofenderme, para demostrarles que no entienden nada, y que antes o después llegará su momento. Sin personalizar, sin emotividad, porque siempre en ese juego haces el juego del que te desea mal".