Borja Vivas se encuentra en el mejor momento de su carrera. Hace unos días batió el récord del campeonato de España de lanzamiento de peso con una marca de 21,07 metros, superando al mítico Manolo Martínez. «Fue una situación surrealista. No había un marcador eléctrico y hubo un parón. Yo sabía que había sido buen lanzamiento. Me asomé a ver la marca y cuando vi el 21 fue increíble. Me eché las manos a la cabeza y no me lo creía», dijo Vivas sobre el momento en el que consiguió la plusmarca.

Pero el éxito del malagueño no es fruto de la casualidad, ya que el atleta dedica buena parte de su días a sus entrenamientos y, además, saca tiempo para ayudar en casa y acometer otras tareas, como la de instruir a futuros policías nacionales en la academia de sus padres. Ahora, el costasoleño se encuentra inmerso en la preparación del Campeonato de Europa de Atletismo, que se disputará en Zúrich entre los días 12 y 17 de este mismo mes.

Un día normal en la vida de Borja Vivas comienza a las 8.45 horas. El deportista tiene una media hora para desayunar y prepararse antes de salir de casa rumbo a Carranque. Allí, el lanzador de peso prepara durante un hora y media, de 9.30 a 11, a los futuros policías nacionales que velarán por nuestra seguridad en la Academia Aprepol. Y los días que no tiene que realizar esta tarea, aprovecha para entrenar en las instalaciones del estadio.

«Empezó todo como una novedad para mí. Es algo gratificante ver cómo se preparan y cómo te muestran su atención. Llevo más o menos un año. Empecé con un grupo pequeño y se va aumentando. Es muy bonito por el tema de ver cómo avanzan. Nunca me lo había planteado pero salió la oportunidad. Son dos días a la semana y preparamos cuatro pruebas muy estrictas. Es muy gratificante ver que aprueban», afirma el lanzador de peso español.

Tras este entrenamiento, llega la hora de ir al fisioterapeuta, de 11.30 a 13.00. Parte del día muy importante en la vida de Borja. Un deporte como el que practica Vivas, que cuenta con 203 centímetros de altura y 143 kilos de puro músculo, requiere un estado perfecto de la musculatura para evitar lesiones, por lo que acuden en sesiones de una hora u hora y media varios días a la semana.

La importancia del descanso

Tras una intensa mañana, llega el momento de volver a casa para comer, descansar y reponer energías. El atleta costasoleño suele llegar a las13.30 a la casa de sus padres, lugar donde come habitualmente, para preparar la comida. Además de un gran deportista, Borja es el encargado de cocinar todos los días para su familia. «Yo me encargo de cocinar en casa. Suelo comer en casa de mis padres porque me viene mejor para ir después a Carranque. Cocino para todos», comenta.

Después del almuerzo, viene el descanso merecido para Vivas. Los descansos en un deportistas de élite son tan importantes o más como los entrenamientos la nutrición. El deportista del Club Atletismo Málaga duerme aproximadamente una hora desde las 15.00 a las 16.30, antes de seguir la tarea diaria. Pero antes de volver a ejercitarse en Carranque, todavía tiene tiempo para echar una mano en la academia de sus padres. Vivas se dirige hacia el local a las 17.00 horas y ayuda en el negocio antes de seguir con su rutina de entrenamientos.

Entreno en pista y gimnasio

A las 19.00 vuelta al trabajo junto a su entrenador, Tomás Fernández. Borja Vivas se entrena en las instalaciones de Carranque durante una hora y media. En la sesión vespertina, el malagueño combina su trabajo en pista, los lanzamientos de peso y los ejercicios físicos en el gimnasio.

Sin duda, el momento del día más espectacular. En el gimnasio de Carranque, Borja Vivas realiza algunos ejercicios para fortalecer la musculatura donde levanta más de 200 kilos. Por ejemplo, el actual campeón de España de lanzamiento de peso realiza series de «sentadillas» con 240 kilos sobre los brazos o ejercicios de pecho con 210 kilos sobre su cuerpo. Evidentemente, todo con la supervisión de su preparador ante el riesgo que implican este tipo de entrenamientos.

Con esto finalizan los quehaceres del costasoleño, que pone rumbo a casa definitivamente alrededor de las 21.00 para cenar y relajarse después de un ajetreado día. Tras cenar y disfrutar de un último rato libre del día, Borja Vivas se marcha a dormir para volver a estar con las pilas cargadas al otro día. Y es que a la mañana siguiente, todo vuelve a empezar.

Así es un día normal en la vida de un campeón de España que prepara el Europeo, que se disputará en Zúrich a partir del 12 de agosto, con todo el optimismo del mundo. «Influyen muchas cosas en el Europeo, los nervios, la hora... pero voy a tener a mi entrenador allí. Ojala pueda repetir la marca. Competimos por la mañana y por la tarde el mismo día (12)», sentenció.

Mucha suerte campeón.