El quinto maratón de la capital costasoleña pasó ayer por muchos puntos emblemáticos de la ciudad. En primer lugar estrenaba lugar de salida. Por primera vez en su lustro de existencia la carrera se inició en el Paseo del Parque a la altura del consistorio de la ciudad. Tras completar la recta de partida, los participantes tomaron el mítico Paseo de los Curas y saludaron a la Farola antes de tomar rumbo hacia Pedregalejo. Después, en su retorno al casco histórico de la ciudad volvieron por el mismo camino y siguieron todo recto hasta llegar a la zona del Palacio de los Deportes José María Martín Carpena. De punta a punta de la capital, los corredores pasaron de visitar el feudo cajista a mirar de cerca el estadio de La Rosaleda, atravesando la Avenida de la Palmilla y el Paseo de Martiricos. Fue el último punto reseñable por el que pasaron los atletas antes de tomar de nuevo camino hacia lo más profundo del centro de la ciudad malagueña. Por allí, los competidores callejearon y callejearon, pasando por lugares como la Plaza de la Merced o Calle Alcazabilla. Para terminar bordeando la Catedral antes de tomar Calle Marqués de Larios, la última estación antes de afrontar la recta de meta, situada en el mismo lugar que la salida. Auténtica ruta turística la que pudieron disfrutar los participantes de la V edición del Maratón Cabberty.