El Marbella FC encajó una dura e injusta derrota ante el Villanovense, después de ver cómo en el tiempo añadido materializaba un tanto en su propia portería. Los extremeños no habían disparado a puerta en todo el encuentro y su portero se había convertido en el mejor de la escuadra serona.

Para los blanquillos supone este traspié su primera derrota del año, con el agravante de que se frena así su progresión para tomar distancia respecto a los puestos de descenso de categoría. Los goles en el último suspiro vuelven a atenazar a un cuadro costasoleño que con un rosario de fichajes ha mejorado significativamente en su juego, respecto al equipo que cerró el año. El Marbella volvió a dominar claramente el juego durante todo el partido, ante un rival que se limitó a defenderse y que solo en la segunda parte buscó algún contragolpe. Los visitantes permanecieron agazapados, esperando una oportunidad que se les presentó en el minuto 92.

Nada más comenzar el partido, al minuto y medio, Ramón Verdú estrelló un lanzamiento directo de esquina en el poste. En el minuto 10, Nacho Matador lanzó una falta desde la frontal, pero su disparo salió centrado y lo atajó el guardameta Fuentes. Pero la mejor ocasión se produciría en el minuto 26. Primero cabeceó Paco Aguza y el rechace del meta le quedó franco a Carlos Expósito, que sacó un duro disparo al que de nuevo volvió a responder Fuentes.

En el minuto 35 hubo otra ocasión, con un pase de Marcos Ruiz que recogió Diego Segura a la espalda de la defensa. Incluso tras la reanudación volvió el peligro por medio de Pato, nada más entrar al campo. Hizo una de sus jugadas por la banda, llegó hasta la línea de fondo y su centro lo remató Diego Segura por encima del larguero.

El Villanovense, agazapado, esperó a los últimos minutos para intentar acercarse con cierto peligro a los dominios de Francis. Y así fue cómo encontró su premio.