Joseph Blatter, que hace apenas cuatro días fue reelegido presidente de la FIFA, anunció este martes de forma sorprendente su "punto y final" a un cargo donde lleva 17 años, y que se ha visto salpicado por una serie de sospechas y escándalos que han tenido por ahora su punto culminante con la detención la semana pasada de siete de los máximos directivos del organismo rector del fútbol mundial.

¿Cuál es la acusación?

“Organización mafiosa, fraude masivo y blanqueo de dinero”. Así lo calificó el Departamento de Justicia de los Estados Unidos. Según la investigación, los acusados pudieron recibir comisiones y sobornos de representantes de medios por más de 100 millones de dólares desde los años 90. A cambio, obtenían derechos mediáticos y de publicidad en torneos de fútbol.

¿Quiénes son los involucrados?

Hay 14 involucrados, 7 de los cuales están detenidos: Eugenio Figueredo (vicepresidente de la Conmebol y de la FIFA), Eduardo Li (presidente de la Federación costarricense de fútbol -FEDEFUTBOL- y funcionario de la FIFA), José María Marín (miembro ejecutivo de la CONMEBOL por Brasil), Julio Rocha (ex presidente de la Federación nicaragüense de fútbol y funcionario de la FIFA.), Costas Takkas (ex secretario general de la Federación de Fútbol de Islas Caimán), Jeffrey Webb (presidente de la CONCACAF y vicepresidente de la FIFA) y Rafael Esquivel (vicepresidente de la Conmebol y presidente de la federación venezolana de fútbol).

¿Por qué actúa Estados Unidos?

Según la Fiscalía de Nueva York, los delitos se cometieron en territorio norteamericano, sobre todo aquellos relacionados con los sobornos en la concesión de los derechos de televisión de la Copa América que se celebrará en EEUU en 2016.

¿Qué va a pasar con los Mundiales de Rusia y Catar?

Hasta este momento, la FIFA tiene intención de mantener ambas sedes, a pesar de que la propia organización pidió al Ministerio Público de Suiza investigar la atribución de tales torneos por sospechas de corrupción.