Sencillamente imparable. Inalcanzable. El Mouaziz volvió a «pasearse» por Málaga. Nadie consiguió seguir su ritmo infernal y sumó su sexta Media Maratón. Una hoja de resultados que anda lejos de ser terrenal. El marroquí está reescribiendo la historia y lo hace con letras de oro. Humilde en el trato y tirano en la carretera, Abdelhadi no pierde el hambre. Ni ser hexacampeón llena su estómago. Muchos grandes del deporte han sufrido una borrachera de títulos que los ha cegado. El «rey de Málaga» ya piensa en revalidar su corona en 2017. Solo esta voracidad explica su excelencia.

El atleta del Club de Nerja UMA dejó escaso margen para la sorpresa. Siendo honesto, ninguno. El malagueño de adopción jugó un pulso contra el crono y lo venció por k.o. Su tiranía sobrepasa la lógica. En los primeros metros ya comandaba una carrera que parece estar hecha a su medida. Si no es así, no se entiende tal dominio. Esa constante victoria contra sí mismo solo es natural de un prodigio. De una persona con unas cualidades sobresalientes. Explotarlas de tal forma es otra de sus virtudes.

A una distancia amplia del ganador entraron los dos hombres que completaron el podio. Mohamed Kallouche consiguió la segunda plaza y confirmó los pronósticos que apuntaban sobre su figura. Su tocayo, Mohamed Abdeselam también acabó con una sonrisa. El atleta mejoró la cuarta posición de la edición pasada y recortó unos minutos al cronómetro. Los magebríes consiguieron este encomiable resultado tras hacer un cambio de ritmo que fue mortífero para los corredores que iban en grupo junto a ellos.

Tras el podio llegaron los dos primeros participantes españoles, casualmente malagueños. En un esprint final se impuso Dani Pérez a Javi Díaz Carretero. Ambos tutearon con el cajón durante buena parte del trayecto, pero los esfuerzos de la primera parte de la prueba acabaron pasando factura a unas piernas que dijeron basta en los kilómetros finales. Aunque las expectativas indicaban que alguno pudiese tocar metal, los resultados igualmente son meritorios. También es muy digno el sexto puesto de Mario García. El malagueño, segundo clasificado en la edición pasada, logró entrar en el top ten. Álvaro Fernández, que fuera olímpico en Atenas 2004, solo pudo ser décimo.

En la categoría femenina la victoria también viajó a Marruecos. Nazha Machrouh se impuso con autoridad y consiguió su cuarto triunfo en esta prueba. Tras un año de parón por embarazo, Machrouh volvió para completar su particular póker. Sorprendió su excelente estado de forma y es que parece que la inactividad no le ha afectado. Detrás de la marroquí entraron las corredoras del Cueva de Nerja UMA, Paula Ramírez y Rebecca García, que completaron el cajón.

Si algo dejó de manifiesto la 26 edición de la Media Maratón de Málaga es que es la fiesta del atletismo malagueño por excelencia. Más de 7.500 corredores, récord de participación, inundaron la ciudad en un día con un clima idóneo para la práctica del running.

Hoy muchos atletas ya están con lápiz en mano tachando las fechas que faltan para la prueba del año que viene. La misma donde la carrera soplará las 27 velas y en la que a buen seguro repetirá buena acogida de los amantes del fondo malagueño. Aunque el horizonte se divisa lejano, El Mouaziz y Nazha Machrouh ya ingenian la estrategia para seguir en el trono. De momento, ambos deben disfrutar durante 365 días de un laudable reinado.