El problema hoy es para el baloncesto. Pero mañana puede serlo para el fútbol, el balonmano, el judo, el pádel o cualquier otro deporte que practiquen los niños en los diferentes recintos cubiertos o al aire libre que salpican toda la ciudad de Málaga y en los que miles de chavales practican su deporte favorito cada temporada.
El caso es que clubes como Adesa Málaga, CD Puerta Oscura o Málaga Básket han recibido recientemente denuncias de vecinos de sus instalaciones por exceso de ruidos, llegando incluso a la apertura de expedientes sancionadores con multas de 12.001 euros y aviso de cierre de las propias instalaciones. Un problema gravísimo que sólo en el mundo de la canasta afecta a cerca de 3.000 niños.
El problema es realmente serio porque el Área de gobierno de Sostenibilidad y Medioambiente del Ayuntamiento de Málaga no puede hacer oídos sordos a las denuncias de los vecinos y está obligado a actuar, como así ha hecho ya con los tres clubes anteriormente mencionados.
El problema del ruido no es el único que amenaza los entrenamientos vespertinos de los distintos clubes de baloncesto y de otros deportes en Málaga. El último decreto de la Junta de Andalucía respecto al uso de equipamientos educativos en horario extraescolar ha modificado el horario, pasando de las 22 horas a las 20 horas, como horario límite para utilizar las pistas para los entrenamientos. El Ayuntamiento de Málaga llevó una moción al pleno instando a la Junta para estudiar alegaciones al citado decreto, algo que todavía no se ha solucionado.
El manifiesto hecho público ayer a través de las redes sociales solicita a las instituciones que se «implementen las posibles medidas correctoras de manera coordinada por la concejalía de Deportes y el Área de Medioambiente para la continuidad de las actividades y respetando tanto los derechos de los vecinos como de los clubes implicados».
De igual forma se solicita que se adecúe la normativa vigente sobre ruido aprobada en Pleno el 26/03/2009 a la realidad actual de los clubes afectados.
