El nadador malagueño Christian Jongeneel ya tiene un nuevo reto. Tras haber vivido ya aventuras en todos los puntos del mundo, desde Nueva York hasta Siria, pasando por Nueva Zelanda o Los Ángeles, con aventuras también en el estrechos de Gibraltar y el Canal de La Mancha, el nuevo reto deportivo con fines solidarios de Chris es unir a nado las dos islas más importantes de las Canarias. Desde Santa Cruz de Tenerife a Agaete en Gran Canaria. Son 70 kilómetros a nado en los que el malagueño invertirá al menos 24 horas.

Jongeneel se lanza a una de las aventuras más arriesgadas en su ya larga experiencia. «Otra vez 24 horas nadando», reflexiona a este periódico. «Aún recuerdo la doble vuelta a la Isla de Manhattan, en Nueva York, el pasado año. Cuando el guía de la embarcación me dio la mano y me dijo que, hasta dentro de 24 horas, no volvería a dármela. Ésta es una aventura diferente, porque es en mar abierto, con condiciones cambiantes y el Atlántico allí tiene mucha fuerza, es muy vivo. Será otro día completo nadando, y las noches se hacen muy duras. Soy consciente de que no siempre se puede ganar al mar, que las personas somos inferiores. Pero vamos a tratar de nadarlo por un nuevo reto benéfico», comenta.

Jongeneel, de la mano de «Brazadas Solidarias», para la Fundación Vicente Ferrer, trata de recaudar 7.500 euros para rehabilitar un orfanato en la India, en el que viven 25 niños. «Está en unas condiciones lamentables y se trata de que tenga una mínima higiene y adecentarlo. Buscamos en la plataforma 7.500 euros. Hemos estado hablando con grandes empresas, pero no ha salido nada. Seguimos tratando de encontrar algunas, comprometidas, que se sumen al proyecto solidario del orfanato. Mientras tanto, vamos haciendo microaportaciones, y eso te llena. Mucha gente va poniendo 10, 20 ó 50 euros, y eso te llena mucho. En la web «Mi grano de arena» ya está abierto el proceso. Todo va al proyecto, íntegro. Ni la web ni nosotros nos quedamos nada. Todo es para el proyecto. Va directo a la cuenta, nadie toca un euro. Yo mismo me pago los billetes de avión y el alojamiento en Tenerife».

Como siempre, Chris se lanzará al agua sin traje de neopreno. Sólo con sus gafas, gorro y bañador, más la vaselina. Cada cierto tiempo, una parada de menos de un minuto para ingerir bebida isotónica, carbohidratos y barritas. Sin tocar la embarcación que hace de guía, por supuesto. Todos los permisos están entregados ya y sólo falta que respondan en Capitanía Marítima de Tenerife.

El malagueño se marchará a finales de mes a las Islas Canarias y tras dos semanas de aclimatación al Océano Atlántico se lanzará al agua a mediados de octubre, «cuando el día acompañe». Durante las 24 horas de travesía, Jongeneel llevará un GPS para que los internautas puedan saber en qué punto está exactamente. Al acceder a la web también podrá entrar, a través de un click, a la página en la que se hacen las donaciones. Es un reto de aventura. Pero, sobre todo, solidario.