Isco Alarcón, jugador malagueño de la selección española de fútbol, es profeta en su tierra. El mago de Benalmádena ha acaparado todas las miradas y ha sido el gran atractivo del entrenamiento a puerta abierta de La Roja en La Rosaleda previo al duelo amistoso ante Costa Rica. Los 13.000 aficionados que han asistido a la sesión (Había un aforo completo de 19.000 con invitación) han disfrutado de la magia del malagueño, al que han coreado en todo momento.

El de Benalmádena ha sido uno de los últimos en salir al césped de la que ha sido su casa. Isco, que ha comparecido en rueda de prensa, se ha hecho esperar y cuando ha saltado al verde La Rosaleda se ha venido abajo. El malagueño, tras su paso por el Málaga y su amor incondicional por e club de Martiricos y su tierra, es un auténtico ídolo y así lo han tratado hoy.

Sergio Ramos y Piqué, con el que el público malagueño ha sido benévolo y solo ha recibido algún pito aislado, han sido los últimos en ponerse a las órdenes de Julen Lopetegui. Muchos chavales jóvenes, acompañados por sus familias, han podido disfrutar de la calidad del malagueño y del resto de jugadores de la selección.

Además, la selección española ha contado con un invitado de excepción, el hijo de Isco, que ha compartido un rato de la sesión con su padre, Morata y Asensio. Por otro lado, la plana mayor del Málaga CF también ha asistido al entrenamiento. Nasser Al-Thani, Joaquín Jofre o Ben Barek han seguido a la selección desde el césped.

Curioso, cuanto menos, ha sido volver a ver juntos a Nasser Al-Thani y Vicente Casado, ahora director de márketing en la Federación Española y antiguo director general del Málaga. Parece que ahora entre ambos, después de acabar en los juzgados, vuelve la sintonía.

Y es que, además de preparar el duelo ante Costa Rica, los jugadores han hecho las delicias de la afición malagueña, muy volcada con el combinado nacional. Cada remate, cada gol, cada regate o cada parada de De Gea era buen motivo para celebrar y todo ante la atenta mirada de un Julen Lopetegui satisfecho por el tirón que genera su selección tras un periodo de transición.

Málaga tiene ganas de selección y hoy se ha demostrado en las primeras horas de La Roja. Mañana, con el plato fuerte del amistoso ante Costa Rica, se completará el círculo.