De Marbella a la gloria. Albert Ramos, número 21 del mundo, vivió su gran fin de semana en Copa Davis al darle a España su tercer y definitivo punto en su eliminatoria ante Gran Bretaña que se ha celebrado en Marbella. El de Mataró ya forma parte de la leyenda del equipo español de Copa Davis. Su participación en la tierra batida del Club de Tenis Puente Romano ha sido crucial. El viernes le dio el primer punto de la primera eliminatoria del Grupo Mundial de la Davis al derrotar a Liam Broady en tres sets (6-3, 6-4 y 7-6 (5). Y el domingo, con la serie 2-1 para España después del triunfo el sábado del doble, volvió a ganar su punto en un encuentro titánico.

El catalán necesitó tres horas y 43 minutos para derrotar al británico Cameron Norrie por 7-6 (4), 2-6, 7-6 (4) y 6-2 y coronarse en Marbella para llevar a España a la siguiente eliminatoria, donde se medirá a Alemania, de nuevo en territorio español. Dos de los tres puntos de la eliminatoria se los ha dado Albert Ramos a España. Él es el hombre de esta serie. Suya es la corona.

El partido fue una verdadera montaña rusa de emociones, en el que Ramos viajó a todo trapo. Por momentos, el jugador español era el único dominador del duelo. Pero Norrie, que ya remontó ante Bautista el viernes dos sets para ganar 2-3, quería volver a firmar una machada histórica. Devolvió cada golpe desde el fondo de la pista, se creció en el segundo set, volvió a remontar en el tercero, pero la solidez de Ramos y el cansancio del británico hicieron que el equipo español pudiera cantar victoria. Para felicidad de la hinchada.

Se hizo rogar el público, que comenzó a llegar a la pista central de Puente Romano pasadas ya las 11.30 horas, cuando el partido ya había comenzado. Y, siempre bajo la amenaza de lluvia, bastante frío y un pique sano entre españoles y británicos, disfrutó de lo lindo del espectáculo. Charangas españolas contra colorido inglés. Una batalla desigual, en la grada como en la pista.

Nadie esperaba, a tenor de cómo arrancó este cuarto punto de la serie de la Copa Davis, que Ramos necesitara casi cuatro horas para liquidar a Norrie. Porque el jugador español empezó como una moto. En un visto y no visto se había situado ya con 5-2 y dos bolas para apuntarse el primer set. Ocurrió entonces, al igual que el viernes, que Norrie se puso a jugar de verdad. Porque el tenis es tenis y la Davis siempre alberga sorpresas.

El británico, 114 del mundo, fue a más. Comenzó a devolver cada bola. Fue un verdadero rival. Luchó cada punto y desesperó a Ramos. El de Mataró, incrédulo, vio cómo el primer set que tenía ganado desde hace un rato, se iba al tie break. Pero, eso sí, en cada momento crucial del partido, Ramos demostró por qué él tiene el bagaje que posee, por qué él está entre los mejores del mundo, por qué ha sido el elegido por el capitán Sergi Bruguera para esta cita trascendental. Fue mejor cuando había que serlo. Y en el tie break ganó por 7-4 y se apuntó la primera manga.

No iba a permitir Cameron Norrie que su parroquia regresara a casa sin su dosis de heroicidad y sin un montón de adrenalina en el cuerpo. Y firmó un segundo set espectacular. Con 2-2, el británico puso la directa y se endosó el segundo parcial por un contundente 2-6.

No se desesperó el español. Al contrario. Curtido en mil batallas, sufridor y consciente de lo que había en juego, Albert, con el apoyo de Marbella, volvió a darle un mordisco al partido en la tercera manga: 3-0. Norrie siempre estaba ahí, aguardando, devolviendo bolas. Pero hizo del partido su particular montaña rusa de sensaciones, subiendo y bajando: 5-5. Y, de nuevo, en el momento clave del set, Ramos fue mejor. De nuevo, en el tie break, supo jugar mejor sus cartas. De nuevo un 7-4. Y el tercer set cayó de su lado: 2-1.

Al británico Norrie ya no le quedaron fuerzas. Su colosal batalla del viernes ante Bautista, remontando dos sets, le pasó factura. La mente es caprichosa. Y la cabeza de Norrie había decidido que su Copa Davis había llegado hasta ahí. Se lo jugó todo en el tercer set. Le salió cruz. Y en el cuarto, el español fue un coloso y no encontró rival para imponerse por 6-2.

Levantó los brazos en ganador, miró al nublado cielo de Marbella, tras casi cuatro horas de dura batalla, y recibió el cariño del público, entregado y deseoso de celebrar junto a él una gran victoria. Marbella, de nuevo, fue talismán. Albert Ramos ya no olvidará nunca este fin de semana. El tenis español y el equipo de Copa Davis, tampoco.

España continúa en la lucha por la "Ensaladara". La segunda eliminatoria volverá a celebrarse en territorio español. El rival será Alemania, que ha derrotado a Australia, también por 3-1. La Davis se va de Marbella contenta y feliz. Y Albert Ramos ya tiene aquí su segunda casa.

Resultados de la eliminatoria

Viernes

  • ALBERT RAMOS - Liam Broady 6-3, 6-4, 7-6(6).
  • Cameron Norrie - ROBERTO BAUTISTA 6-4, 6-3, 3-6, 2-6, 2-6.

Sábado

  • CARREÑO/LÓPEZ - Murray/Inglot 6-4, 6-4, 7-6(4).

Domingo

  • ALBERT RAMOS - Cameron Norrie 7-6(4), 2-6, 7-6(4), 6-2.