No hay quién pare a este Marbella FC 2017/2018. El equipo blanquillo se ha colocado en lo más alto de la clasificación del Grupo IV de Segunda División B, tras ganar este domingo 0-1 en el campo del hasta entonces líder FC Cartagena, en una nueva exhibición de fútbol de un equipo sin fisuras, compensado en todas sus líneas, que sabe a lo que juega y que con el marcador a favor es casi invencible.

Los blanquillos suman 51 puntos en 27 jornadas, después de 15 victorias, seis empates y solo seis derrotas desde que arrancó la temporada el pasado mes de agosto. Números de un líder que ha convertido el Municipal marbellí en un fortín del que solo se han escapado 8 puntos este curso, con dos derrotas y un empate. Los 39 goles a favor y sólo 21 en contra son otras dos claves del éxito de un equipo que sin hacer ruido, con menos presupuesto que el año pasado (900.000 euros respecto a los 1.4 millones de la pasada temporada) y con menos fichajes exóticos ya mira a todos los demás por encima del hombro.

Resulta llamativo, desde luego, el número de minutos que lleva el equipo sin encajar un gol. El último lo recibió hace cinco jornadas en la visita al Municipal de San Fernando. Lo anotó Pedro Ríos en el minuto 63 de aquel partido. Desde entonces, cuatro partidos consecutivos dejando la puerta a cero para un total de 387 minutos sin encajar ningún gol.

Otro dato que demuestra el poderío de los marbellís en esta Liga es que el equipo costasoleño no sabe lo que es perder desde que empezó este 2018. Suma 9 partidos seguidos sin conocer la derrota desde que el ya lejano 10 de diciembre cedió en su campo ante el UCAM de Murcia (1-2). Más de dos meses y medio en los que el balance es de 6 victorias y 3 empates, para un total de 21 puntos sumados de 27 posibles.

A pesar de que el discurso de su técnico, Fernando Estévez, sigue siendo el de sumar la cifra de puntos necesaria para certificar la permanencia y luego empezar a mirar hacia arriba, lo cierto es que la imagen que da el Marbella FC es la de un líder serio y solvente que puede soñar con el ascenso a Segunda División, a poco que le respeten las lesiones y mantenga su buena dinámica de juego y resultados.

De hecho, tras la disputa de la pasada jornada, la 27 de la Liga, el equipo blanquillo aventaja ya en 10 puntos al UCAM de Murcia, quinto en la tabla. Como quiera que los cuatro primeros serán los que lucharán por el ascenso, parece que buena parte del camino está hecho a falta de 11 jornadas para que acabe la liga regular y comience la ansiada fase por el ascenso.

No hay que obviar, eso sí, que el equipo que acabe campeón de este grupo IV tendrá una doble oportunidad de ascender ya que jugará una eliminatoria directa con otro de los tres campeones de los otros grupos de Segunda B. Si supera ese cruce, será equipo oficialmente de Liga Adelante y si pierde, entonces se reenganchará a la fase de ascenso teniendo que superar dos eliminatorias para lograr el objetivo.

Las sensaciones actuales del equipo son muy buenas, pero en el recuerdo está, eso sí, lo ocurrido la pasada temporada, en la que el Marbella FC empezó como un tiro, batió todos los récords de victorias seguidas en la Liga en el Grupo IV de Segunda B, pero luego fue a menos a partir de diciembre, hasta el punto de quedar fuera de los 4 primeros y no tener ni siquiera opción de luchar por subir a la Liga Adelante. Si echamos la vista atrás justo un año, sin ir más lejos, el Marbella FC era tercero en la liga tras la jornada 27 de la temporada 2016/2017, con 48 puntos, a 4 del Cartagena y a 6 del entonces líder, Lorca, con 54 puntos. Pero ese esprint final no fue bueno y el equipo no aguantó entre las cuatro primeras plazas.

La dinámica actual, desde luego, es otra muy distinta a la de hace ahora 12 meses. No parece que el equipo vaya a tropezar dos veces en la misma piedra. Este Marbella FC no tiene altibajos y su ritmo es constante en busca de un objetivo del que los dirigentes del club sigue sin querer hablar, pero que cada jornada que pasa es más evidente: ascender a Segunda División.