La historia de la primera jornada liguera se repitió ayer en Melilla para un Marbella que, no obstante, no mereció puntuar sobre el césped del Álvarez Claro. Richi, con un tanto en propia meta, puso por delante a los costasoleños con apenas unos segundos de juego cumplidos. Quedaba todo por delante y los locales no tardaron en tomar las riendas del juego.

Mahanan fue el encargado de igualar el marcador. En el minuto 11 lanzó un saque de esquina al corazón del área, donde su compañero se encargaba de rematar para batir al cancerbero Wilfred. El cuadro melillense ya mereció adelantarse antes del descanso. Sin embargo, el arquero visitante demostró su extraordinaria calidad con una gran estirada ante el disparo de Menudo.

Tras la reanudación no bajaron el pistón los locales. Al contrario, en una de sus constantes llegadas al área, Yacine volvía a desatar la alegría en las gradas del estadio. Fue con un remate bajo con el que lograba superar a Wilfred. La jugada había partido de las botas de su compañero igor Martínez.

El Marbella tras esta nueva derrota liguera intentará doblegar al filial sevillista el próximo domingo, en su feudo, a partir de las ocho de la tarde.