En el pabellón Blas Infante sólo paran de escucharse los botes del balón sobre el parqué cuando se apagan las luces a las 23.30 horas. Mientras tanto, desde por la mañana, algunas de las jugadoras del Asisa Alhaurín de la Torre se ejercitan en las instalaciones del pabellón municipal, completando por las tardes los entrenamientos con la plantilla al completo.

Las gotas de sudor llevan empapando la cancha de madera desde septiembre, y es que el conjunto comandado por Francis Trujillo comenzó en esa fecha a preparar uno de los mayores retos de la historia de un humilde club como el Club Baloncesto Alhaurín de la Torre (CBAT): competir en Liga Femenina 2.

Para que una estructura como la que se ha generado en torno al Asisa funcione, el técnico Trujillo tiene muy claro los objetivos: «Nuestra prioridad desde el principio es conseguir que el equipo se establezca en la categoría, que seamos capaces de hacernos fuertes en casa y que podamos ser un conjunto competitivo en la carretera», asegura el entrenador jefe, que insiste: «El objetivo principal es asentarnos en Liga Femenina 2».

Después de un intenso verano en los despachos del CBAT, el núcleo fuerte que consiguió el ascenso se ha mantenido, y este año continúan piezas claves como es el caso de la capitana, Lorena Liñán, la escolta Ana García o la «hija adoptiva» de la localidad, Jay White, una de las renovaciones estrellas. Según el presidente del club, Juan Pedro Parra, la organización ha querido mantener una misma línea de trabajo y apostar en lo que realmente creen. «Al final lo que queremos es aunar todo ese esfuerzo y trabajo que se está haciendo con la sección femenina del club», explica el máximo mandatario, contando el proceso que se ha vivido dentro del seno del CBAT durante estos meses.

«La idea central que manejamos desde el principio era hacer un equipo formado, en su gran mayoría, por jugadoras malagueñas e hicimos ofertas económicas altas en el mercado actual, y hemos logrado ese propósito al que se han sumado varios refuerzos de gran calidad». Esos fichajes a los que se refiere son los de la base cordobesa de Adeba, Bea Bajo, que la escuadra azulona sufrió durante los cuartos de final el año pasado; la exterior linense, Sara Sánchez, procedente de Liga 2, y la piedra angular, Jasmine Lumpkin. La polivalente norteamericana llega directa de la Universidad de Texas A&M, uno de los más prestigiosos programas, y ya ha demostrado durante los amistosos su importancia por medio de un físico dominante y una ética de trabajo intachable.

Las alhaurinas fueron las anfitrionas el fin de semana pasado del I Trofeo Costa del Sol Femenino y, tras supera a Unicaja, alcanzaron la final ante RaCa Granada, equipo con experiencia en Liga 2, disputando tres cuartos del choque a gran nivel, además de dejar muy buen sabor de boca en la afición.

La capitana y referencia para las de Trujillo, Lorena Liñán, comenta la ilusión y el empeño que tiene el propio equipo en que las cosas vayan bien: «Tenemos mucha ilusión y ganas de que empiece la competición y, aunque nos falta mucho por trabajar, poco a poco vamos conociéndonos entre todas y jugando un mejor baloncesto, lo que al final tan solo conlleva tiempo y horas de sacrificio». Para la marbellí, los objetivos son los mismos: «La cuestión está en sacar el máximo del equipo y como mínimo mantenernos, crear un fortín en casa y competir al 100% con los equipos de la liga que tienen nuestro nivel».

Atrás queda la época de los sueños, en la que costaba ganar un solo partido en la liga Primera Nacional. Para Alhaurín es tiempo de ser la referencia del baloncesto femenino en la provincia de Málaga, generando el 100% de sus recursos, profesionalizando su estructura en la medida de lo posible y contando con el respaldo de un pueblo y sus instituciones que se han volcado para animar a su equipo sin dudarlo un instante. El verano ha terminado y el estreno del Asisa Alhaurín en Liga 2 se ha hecho mucho de rogar. Este sábado en Lanzarote, el equipo local del Magec Tias será testigo del inicio de una cita histórica a la que se enfrenta al modesto y ya histórico conjunto alhaurino.