Insistir, persistir y nunca desistir en el objetivo de sacar puntos en un ambiente contrario para revertir los anteriores resultados. El BeSoccer CD UMA Antequera se sacó la espinita de no cumplir debidamente el papel de visitante en el duelo de dieciseisavos de final de la Copa del Rey en el Centro Insular de Deportes con una goleada (3-6). Un argumento sólido al que agarrarse este viernes, a las 20.45 horas, en la séptima jornada de Liga contra el Fútbol Emotion Zaragoza.

Un rival muy incómodo en su pista, que a partir de un sistema defensivo particular y eficaz genera multitud de problemas en el juego de su oponente. Los de Manuel Luiggi Carrasco "Moli" esperan seguir creciendo en la última parada de un trayecto de tres desplazamientos consecutivos. Dos dentro del campeonato doméstico; el de Santa Coloma y el mencionado ya en el Pabellón Siglo XXI; y el del estreno en el torneo del KO en tierras canarias.

Fútbol Emotion Zaragoza no pudo jugar en la sexta fecha del calendario liguero en Paterna frente al Levante UD por las fuertes lluvias caídas el pasado fin de semana en la Comunidad de Valencia. El compromiso quedó aplazado y, por tanto, en la tabla clasificatoria se mantiene undécimo con seis puntos, dos victorias y tres derrotas. Sacó adelante en territorio maño un igualado envite con Industrias Santa Coloma (2-0) y otro en Segovia (2-3). Los universitarios le siguen de cerca desde el décimo tercer lugar con un punto menos y ganas de poder declinar la balanza de un enfrentamiento directo por escalar a una zona más cómoda. La prueba de que es posible puntuar en la cancha del representante aragonés en la máxima categoría se reflejó en el curso 2015/2016. Un empate a seis goles fue el marcador reflejado en el electrónico al final de los 40 minutos.

La Copa del Rey se convirtió en la mejor evasión del plantel verde después de no ofrecer un rendimiento adecuado en la primera de las dos salidas seguidas. Ganar al conjunto entrenado por Suso Méndez trasladó una dosis de energía extra para continuar puliendo los errores e ir imponiendo las virtudes colectivas e individuales de cada jugador. "Espero que eso haya servido para motivarnos e ilusionarnos con llegar al partido que viene ahora y que se antoja complicadísimo. El equipo en Gran Canaria mejoró la imagen de la semana anterior y parece que vamos por el buen camino. Todo depende del estado de ánimo, de cómo competimos y no relajarnos en los primeros minutos que nos está pasando factura", comenta el preparador malagueño.

En el choque con Gran Canaria volvió a repetirse un mal tramo inicial de los pupilos de Moli al igual que en Santa Coloma. No tuvieron que remontar cinco dianas en contra, pero sí tres. Un aspecto que preocupa a un cuerpo técnico empeñado en subsanarlo. Al máximo nivel no es una tarea nada fácil ganar, por lo que si otorgas concesiones o te muestras despistado, los adversarios pueden sacar provecho. "Este es el tema que tenemos que intentar resolver y hablar para analizar el porqué de hacer tanta agua en los primeros minutos. Nos cuelan goles y después es complicado cambiar el resultado. Nos salió la cosa bien en el choque de Copa. Tuvimos fortuna de cara a portería, peleamos, pero es que remontar un partido a un equipo de Primera, un 3-0 o un 5-0, es muy difícil", esboza.

Antes de sentir de nuevo la magia del mejor fútbol sala en el Pabellón Fernando Argüelles, el cuadro antequerano diseña la estrategia con la que asaltar el territorio de un club que viene de presentar batalla la pasada temporada, con un papel especial de ?matagigante? en la Copa de España, y en la actual no quiere perder una dinámica de éxito que se emborró un poco al arrancar con dos derrotas. "A mí Zaragoza me gusta. El sistema defensivo que ejecutan siempre se les atraganta a los equipos. Tenemos que trabajarlo y saber cómo lo hacen. Un conjunto fuerte en la ejecución de la estrategia. Como nos despistemos, nos cuelan la pelota. Retamar maneja muy bien los tiempos del partido. Una plantilla con veteranos y gente joven que nos lo va a poner muy difícil", señala Moli.