El 12 de enero se acerca. Es un día marcado en rojo en el calendario del balonmano malagueño, porque al fin se rendirá el esperado, ansiado y merecido homenaje a José Luis Pérez Canca, fallecido de forma prematura a los 44 años por una enfermedad, en el verano de 2015. Ha hecho falta mucho tiempo, pero al fin todo está ya listo para que el próximo 12 de enero de 2019, la Ciudad Deportiva de Carranque cambie el nombre de su pabellón, que pasará a denominarse «José Luis Pérez Canca», en un acto que será un guiño al balonmano base, con 400 niños jugando toda la mañana, y que se culminará con un partido de veteranos entre el equipo «Amigos de Pepelu» contra el «Amigos de Pérez Canca».

Precisamente, en el pabellón de Maristas, los viernes por la noche, ya han comenzado los entrenamientos para que el equipo «Amigos de Pepelu» llegue al encuentro en la mejor forma posible. El equipo, adiestrado por Juanjo Fernández y Ernesto Ruiz, acumula ya alguna sesión de trabajo, con caras históricas del balonmano malagueño: Paco Berrocal, Curro Lucena, José Vázquez, Nacho Vico, Juan Carlos Mérida, Adolfo Gimenez, Jesús Fernández..

Y es que hay que retomar las buenas sensaciones tras muchos años sin competir y, además, en plenas fiestas navideñas. Ellos forman la punta de lanza de esta gran fiesta, en la que habrá hasta una treintena de excompañeros y amigos del jugador que vendrán a Málaga expresamente para jugar y rendir homenaje en el «Amigos de Pérez Canca», entrenado por Quino Soler y Curro Lucena, y en el que habrá jugadores y compañeros del nivel de JJ Hombrados, Manuel Pérez, Álvaro Ferrer, Juan Vázquez «Chispi», Javier Valenzuela, Carlos Viver, Pepe Lubián, Mariano Ortega, Demetrio Lozano, Xavi Pérez, Cristian Malmagro, Sergio Berrios, Rafa Baena o Manolo Colón.

Pepelu tuvo una sensacional carrera que arrancó en el Colegio Maristas y que le llevó a jugar en el Puleva y en León, Ciudad Real y Granollers, para regresar a Antequera, donde el jugador internacional acabó su carrera deportiva.

El sábado 12 de enero al fin se le rendirá tributo en un gran día de balonmano que arrancará a las 9.30 horas con multitud de partidos de equipos de toda la provincia de edad prebenjamín, benjamín y alevín. El acto en el que se inaugurará el nombre del pabellón, con nueva rotulación y se descubrirá la placa que rememore el momento se vivirá al mediodía, con familiares del jugador, amigos, excompañeros y representantes del balonmano y de la política. Y a partir de las 12.30 horas se disputará el encuentro amistoso entre los dos equipos con el que se cerrará, tras un ágape de despedida, una jornada que será inolvidable para el balonmano malagueño.