El atleta marroquí Abdelhadi El Mouaziz volvió a cumplir con su cita en lo más alto del podio de la Carrera Urbana Ciudad de Málaga, organizada por Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Deporte, y con el patrocinio de El Corte Inglés y Fundación Unicaja.
El Mouaziz ya suma siete títulos en una prueba a la que se adapta como anillo al dedo. Su compañera de club en el Cueva de Nerja-UMA, Lola Chiclana, completó el doblete de los «jureles» con su victoria en féminas, repitiendo el mismo resultado de 2018, cuando ambos atletas también se subieron a lo más alto del podio.
La cita, de carácter solidario, alcanzó en este 2019 su 41 edición y tuvo como nota trágica la muerte de un corredor durante la disputa de la misma. El participante se sintió indispuesto cuando atravesaba la zona de Capuchinos, en torno al kilómetro 7 de la carrera, y entró en parada cardiorespiratoria, sin que los servicios médicos pudieran hacer nada por salvarle la vida
Se cumplieron las previsiones y la lluvia de las horas previas de la madrugada dejó paso a sol y nubes a la hora del inicio de la prueba. Los corredores partieron con 17 grados de temperatura y una humedad algo superior a la habitual, aunque las condiciones para la carrera fueron muy buenas por la ausencia del siempre molesto viento.
De los más de 18.000 inscritos, 12.014 pertenecíann a la habitual prueba de 10 km, mientras que cerca de 6.000 se inscribieron en la Mini Carrera, enfocada para todas las edades y que tuvo 4 kilómetros de recorrido para todos los públicos.
El Mouaziz fue un martillo pilón desde la línea de salida, tomó la delantera y marcó el ritmo de la prueba a todos sus rivales, conocedores de que era el hombre a batir. El jiennense Cristóbal Valenzuela fue el que más inquietó al marroquí, que tuvo que esperar al kilómetro 7 para deshacerse de él. El podio final, tras El Mouaziz y Valenzuela, lo completó Pablo Salcedo, también del equipo nerjeño.
En categoría femenina repitió el triunfo del año pasado Lola Chiclana, que superó esta vez en la línea de meta a la británica Helen Cross y a la pizarreña Belén Infante, que también fue bronce el pasado año 2018.
Aunque los ganadores masculinos y femeninos son los nombres propios de esta carrera, los verdaderos protagonistas son los más de 17.000 anónimos que se calzan cada año las zapatillas para hacer deporte por las calles de la capital de la Costa del Sol. Una enorme hilera de corredores arrancó desde el Paseo del Parque mostrando el mismo decorado de las últimas ediciones para los miles de espectadores que animaron a sus familiares, en particular, y a todos los corredores, en general, apostados en el discurrir de los 10.000 metros de la prueba larga y, sobre todo, en los 4.000 de la mini carrera, en la que familias enteras de abuelos, padres, hijos y hermanos pudieron disfrutar del recorrido juntos sin ningún afán competitivo y sí el de pasar un buen rato juntos.
La prueba, una vez más, contó con el sello de Evento Sostenible otorgado por el Ayuntamiento de Málaga sobre unos criterios de sostenibilidad planificados y testados por el Programa Municipal de Concienciación «Málaga Cómo Te Quiero!?».
