El exdirector de La Academia del Málaga CF, Rafa Gil, continuará con su labor a la caza de jóvenes talentos en un nuevo país asiático. Esta vez será el encargado de coordinar la estructura académica del campeón de la Superliga de Malasia, los «Tigres del Sur» del Johor Darul Ta'zim FC.

«Es un verdadero orgullo y un nuevo reto personal tras mis experiencias en Arabia Saudí, donde llegué a dirigir a la selección absoluta en un encuentro disputado precisamente en Malasia, Emiratos Árabes y China, donde también viví una experiencia académica inolvidable», relata el entrenador toloxeño. Su anterior etapa internacional, antes de volver al Málaga CF y cerrar un nuevo ciclo este mismo año, corresponde a sus 18 meses en Manchester como ojeador del Espanyol.

El primer equipo del Johor acumula seis campeonatos consecutivos y tiene cerca de una docena de técnicos, incluidos preparadores físicos, con pasaporte español. Gil de momento ha firmado una temporada con la opción de ampliar el contrato automáticamente a una más. El primer cometido será iniciar la pretemporada del filial de este club, que milita en la segunda máxima categoría del fútbol malasio. «Volaré el día 3 para empezar el 5 como técnico de este conjunto y regresaré para pasar los días de Navidad en Málaga, antes de volver el 3 de enero, ya con toda mi familia, a Malasia», relata.

En el cuadro técnico de la primera plantilla figura el exariete argentino Lucho Figueroa, que fuese máximo goleador del Johor en los títulos conquistados tanto en 2014 como en 2015. Pero en el palmarés histórico también figura el internacional español Dani Güiza, que fuese uno de los dos máximos realizadores de la Superliga lograda en 2013. «Es un club muy potente, presidido por Tunku Ismail Sultan Ibrahim», expresa Rafa Gil refiriéndose al hijo del sultán de esta ciudad-estado muy próxima a Singapur y con 3,5 millones de habitantes.

Gil agrega que el Johor acabó la pasada campaña con apenas una derrota en 22 jornadas. Venció con una autoridad manifiesta porque se impuso en 16 encuentros y sólo cedió cinco empates. El estadio tiene capacidad para 30.000 espectadores que han coreado estas últimas campañas a jugadores españoles como Nacho Inza, su hermano Kiko, o durante la pasada temporada a Aarón Ñíguez, hermano del internacional español Saúl Ñíguez.

Es también un país conocido por la afición malagueña gracias a la presencia en la propia Superliga, en distintas etapas, de futbolistas costasoleños de origen filipino como los hermanos Guirado o Álvaro Silva.

«Seguimos siendo, todos los entrenadores españoles, garantía de éxito fuera de nuestras fronteras. El momento dulce que vivió la selección española y los títulos continentales y mundiales del fútbol español, con una forma muy definida de sacar el máximo rendimiento de nuestros jóvenes jugadores, nos hace ser muy apreciados».