El Marbella FC volvió a ganar en casa (2-1). Logró imponerse al filial sevillista por la mínima y reencontrarse con el triunfo, gracias a un doblete de su Pichichi, el granadino Óscar García, en la primera parte. Tras el descanso, tal y como ya había advertido Cubillo en la previa, el Sevilla Atlético evidenció su peligrosidad y acortó distancias.

Los blanquillos siguen en zona de ascenso. En la recta final del encuentro pudieron ampliar la renta local al contragolpe, frente a un rival volcado hacia el empate. Pero no hubo más tantos después de la única diana sevillista, transformada en el minuto 83.

Fiel a su estilo, el Marbella salió de inicio mucho más concentrado. Y no tardó en obtener los frutos a esa presión adelantada. Esta vez el primer tanto llegó a balón parado. Después de un saque de esquina, tocó Dani Pérez y remachó de tacón Óscar García. Solo habían pasado 11 minutos.

En el minuto 14 pudo llegar el segundo, con una falta lateral que Elías Pérez envió al larguero, aunque en la acción siguiente el Sevilla Atlético dio un gran susto con un mano a mano que Juanlu no logró rematar entre los tres palos. Pero sólo nueve minutos más tarde llegó la segunda diana. Fue en un balón largo sobre Mustafá, al que se anticipó fuera del área el portero del filial. Óscar García, que acompañaba la jugada, se encargó de marcar de nuevo, a puerta vacía.

Después del descanso dieron un paso adelante los visitantes. Así Wilfred tuvo que sacar un disparo de Diego Torres en el minuto 48 y los blanquillos lograron, como podían, contener el apretón sevillista. Los costasoleños guardaban la ropa y salían con velocidad cuando más apretaban los canteranos. Así en el minuto 69 tuvo Mustafá una ocasión muy clara, pero disparó fuera. Y luego la volvió a tener su compañero Yaimil.

El preludio del único gol visitante fue un remate de Berrocal en el minuto 86. A continuación, en una jugada ensayada, Pedro Ortiz hizo el 2-1. La igualada la tuvo Pejiño en el minuto 91, pero salvó Wilfred ante el nerviosismo generalizado.