No existe un acuerdo entre lo que se debe ser o no ser
Su origen está en el interior de cada ser humano
Su descubrimiento ni si quiera se plantea
No se compra ni se vende
No se pide ni se ofrece
No se exige ni se perdona
Podría llamarse como un pacto personal con uno mismo, un respeto hacia el propio pensamiento, hacia la propia experiencia, hacia el camino de uno mismo, con actitud, con buenas formas
Un compromiso al equilibrio
Un amor a tu verdad, a tu justicia, sin hacer daño a nadie de manera premeditada y prestando atención a los detalles
Valentía para asumir riesgos
Seguridad en uno mismo ante las buenas y malas oportunidades
Capacidad para decidir ante el éxito y el fracaso, ante el presente inmediato y el futuro paciente
Conocimiento y compromiso con lo que uno realmente desea
Valor para priorizar lo urgente, lo importante y lo necesario
Compromiso con la bondad y el buen hacer
Aprendizaje por encima del sufrimiento y el capricho
Se puede trabajar cada día a través del respeto hacia uno mismo y los demás
Se puede controlar cada día la curiosidad, el deseo y la impulsividad
Se puede luchar cada día por uno mismo y por alguien
Gana batallas a través de la perseverancia
No se impone, se consigue a través de la libertad del corazón
Sus principales enemigas son las mentiras y las traiciones
La inseguridad, la impulsividad, las dobles intenciones, lo poco claro, lo escondido, lo gris€ no se suelen llevar bien tampoco
La lealtad no se rige por palabras, sino por actitudes y comportamientos
Nos define
Está basada en la confianza y el respeto por uno mismo
Y está en peligro de extinción.