Los amantes del fútbol llevaban días, incluso ya meses, esperando el día de ayer. Quizá no todos son seguidores de la Bundesliga, la máxima categoría alemana, habrá muchos que incluso no conozcan a más de un par de jugadores de los principales equipos pero ayer, el fútbol alemán fue el epicentro del deporte rey durante todo el día.

Los futbolistas alemanes fueron los primeros en entrenar, han sido los primeros en regresar a competir y en matar el gusanillo de los futboleros, ansioso por ver un balón colarse con fuerza hasta el fondo de la red. Eso sí, todo se desarrolló en un ambiente totalmente diferente al de la última vez en la que 22 futbolistas saltaban a un terreno de juego para enfrentarse.

Así, después de dos meses, miles de personas pudieron seguir en directo el Derbi del Ruhr entre Dortmund y Shalke (4-0), el Eintracht-Mönchengladbach (1-3), el Leipzig-Friburg (1-1), el Augsburg- Wolfsburg (1-2),el Hoffenheim-Hertha (0-3) o el empate a cero entre Fortuna y Paderborn. En el menú de hoy estará el Köln-Mainz y el Union Berlin-Bayern