El Marbella Fútbol Club ha regresado esta mañana al Estadio Municipal Antonio Lorenzo Cuevas. Después de casi 70 días sin poder entrenar sobre el césped, y teniendo que trabajar en solitario en sus casas, los jugadores han recuperado la sonrisa.

En este primer día de trabajo, y para cumplir con el protocolo impuesto por el Ministerio de Sanidad y el CSD, sólo se han citado a ocho jugadores, que han acudido al estadio de dos en dos para poder trabajar de manera individualizada y manteniendo en todo momento las distancias de seguridad.

El trabajo ha comenzado temprano, a las 9:00 horas, momento en el que arrancaba el entrenamiento para Manel Martínez y Saúl González, que han sido los más madrugadores. Tras ellos han entrenado Óscar García y Lolo Pavón; Javier Añón y Elías Pérez; y Álex Bernal y Juanmi Callejón.

Una jornada muy diferente a lo que están habituados los futbolistas que tenían que llegar por separado al estadio, pasar por un control de temperatura o desinfectarse antes de acceder a las instalaciones.

El primer paso ha sido comprobar el estado en el que llegaban los jugadores, que han cumplido de manera excepcional con los entrenamientos individuales que han realizado durante el confinamiento. Todos han llegado un buen estado físico, tal y como han reflejado las distintas mediciones.

A continuación, trabajo físico y unos test para comprobar el estado de forma. De nuevo buenos resultados y satisfacción por parte del cuerpo técnico por la actitud responsable mostrada por la plantilla.

En el cambio de jugadores, los encargados del material del club han desinfectado todo el equipamiento y material utilizado para garantizar la seguridad de los jugadores en todo momento. El equipo sonríe en este primer día de trabajo y ya sólo piensa en preparar, de la mejor manera posible, el play-off de ascenso.