Nadie dijo que configurar la plantilla 2010/11 iba a ser una tarea sencilla. El Unicaja se ha quedado, prácticamente en 48 horas, sin Plan A y sin Plan B para reforzar su perímetro. El elegido, Rafa Martínez, prefirió la seguridad de Valencia, un lugar conocido, sin exigencias, donde se cobra. Las dos alternativas siguientes se han tambaleado. Una se ha ido al suelo directamente. Juan Dixon supo ayer que la FIBA le ha sancionado con un año, por lo que no podrá jugar hasta el próximo 11 de febrero de 2011. La otra, encabezada por Thomas Kelati, tampoco está apoyada sobre bases sólidas. Demasiados clubes revolotean por el nido del futuro jugador polaco. Y eso, en tiempos de crisis, engrandece a los representantes.

El lunes no pudo comenzar peor en los despachos de Los Guindos. Ya les comentábamos ayer que había un run run por los principales mentideros del mundillo del básket sobre la sanción a Dixon. Se decía que iba a ser de un año, tras su positivo por nandrolona. Y así fue. La FIBA confirmó su sentencia –ver en la web de La Opinión de Málaga– por todo un año. Demasiado tiempo para esperar por el escolta de botas verdes que nos hipnotizó a todos con su clase y su desparpajo los siete partidos que disputó en Málaga.

Dixon era el preferido, el número uno. Había un acuerdo verbal con el francotirador para venir a Málaga si el castigo hubiera sido por seis meses. Pero ya no será así. El club decidió activar entonces las negociaciones con Thomas Kelati, que también cuenta con el visto bueno del técnico, Aíto García Reneses, y es ya el candidato principal. El problema de la operación es, como ya hemos dejado claro en estas páginas, el apartado económico. Los agentes del escolta de raíces eritreas se han descolgado exigiendo un mínimo de dos años y unas cantidades que rondan, coste club, el millón por curso.

«Es el jugador que más llamadas y ofertas ha provocado este verano de nuestra larga cartera de jugadores. Tenemos muchas y buenas opciones para el chico», sentenciaba ayer Gorka Arrinda, el agente español del escolta.

Arrinda aseguró que Kelati cuenta con dos ofertas por dos años, una del Power Electronics Valencia y otra millonaria de un equipo extranjero –el Asecco Prokom polaco– más «el interés de varios equipos de primer nivel». O sea, del Real Madrid, del Caja Laboral o del Olympiacos, clubes que han preguntado por su situación. El Unicaja ha ido más allá, poniendo sobre su mesa un ofrecimiento por dos cursos, uno garantizado y otro opcional, con cantidades que no contentan a sus agentes, ni al americano ni a sus socios en España.

En el Unicaja no van a perder el tiempo. El director deportivo, Manolo Rubia, ya trabaja con el técnico verde en la confección de un listado de escoltas a los que tantear si se llega a agotar la vía de Kelati. Hay nombres interesantes, muy potentes, a los que aún no se han dirigido los rectores verdes, pero que encajarían perfectamente en el perfil requerido y que están en mercado. Sus nombres están sobre la mesa. En los próximos días podría abrirse esta vía. Dependerá de Kelati.