Sólo 10 días después de que haya acabado la temporada para el equipo verde, casi una decena de nombres se han vinculado ya al futuro del club de Los Guindos. O sea, casi a uno por día. Cabezas, De Colo, Planinic, Pappas, Panko, Doellman, Hettsheimeir o Germán Gabriel son sólo algunos de los nombres más destacados que ya han sonado en la órbita verde.

El club trabaja con una lista amplia de opciones para cubrir todos los puestos, pero es muy pronto para cerrar fichajes y los nombres que se filtran muchas veces responden más a intereses de sus agentes que a un deseo real del club en cuestión por contratar sus servicios.

Pero no es el caso de Blake Schilb, jugador del Chalon de Francia, cuyo nombre está marcado en mayúscula, en rojo y subrayado en la agenda del director deportivo cajista, Manolo Rubia, desde hace ya un año y medio.

Ayer, el sitio web «solobasket.com» se hacía eco de este interés del cuadro de Los Guindos. Schilb (2.00/28 años) es un jugador polivalente, que puede jugar de escolta y de alero, pero que también se defiende en el poste bajo. Los que le han visto jugar aseguran que es un buen lanzador y destacan su capacidad de pasar el balón con criterio. Su único punto débil parece que es la defensa, en la que no es un «especialista».

Buenos números. Sus números en la Fase Regular de la Liga francesa son bastante llamativos: 16.3 puntos por partido, 3.4 rebotes y 3.7 asistencias. El norteamericano es el líder de su equipo, con el que se aupó al título de la Copa de la Semana de los Ases, siendo considerado MVP de la competición. Además, llevó a su equipo hasta la final de la Eurochallenge (29 puntos en semifinales ante el Triumph ruso, con 5/5 en triples), donde los galos cayeron ante el Besiktas turco.

A pesar de que se ha hablado últimamente de que el jugador del Chalon que Manolo Rubia tenía apuntado en la agenda y había ido a ver in situ era Malcom Delaney, el que realmente interesa ahora en el club de Los Guindos es Blake Schilb. Eso sí, hay una pega, y es que Schilb tiene un año más de contrato con el Chalon, por lo que habría que negociar su libertad y ya se sabe que los tiempos de pagar cláusulas han pasado a mejor vida en la entidad cajista. Aunque según ha podido saber La Opinión de Málaga, desde el club se asegura que si se puja por él, ése no será un problema para su fichaje.

Lo que parece que no se hará es ir a por Schilb sin que el próximo entrenador dé el visto bueno. Así que habrá que esperar a que Jasmin Repesa, si es que él es el elegido, o Luis Casimiro, si finalmente renueva, aprueben su fichaje.

A día de hoy, el Unicaja sólo mantiene -que se sepa- una negociación abierta. Es la que hay con Carlos Cabezas, de la que ha dado cumplida información este diario desde la semana pasada. El todavía jugador del CAI de Zaragoza tiene encima de la mesa de su representante, David Carro, una oferta cajista sobre la que todavía no hay una contestación afirmativa. De todos los demás nombres que se han escuchado, no hay más que interés por algunos, anhelo «imposible» por otros e incluso nada de nada por muchos de ellos.

De momento toca esperar. El verano va a ser largo y los nombres se multiplicarán con el paso de las semanas.