El futuro de Joel Freeland es una de las cuestiones capitales que rodean el día a día de la planificación del Unicaja para la próxima temporada. La dirección deportiva trabaja sobre la hipótesis de que el ala-pívot británico cumplirá su contrato €del que le restan todavía dos años más€, pero sin obviar que hay equipos que han seguido a Freeland durante toda la temporada y, sobre todo, que los viajes de los ojeadores de Portland a Málaga han sido continuos, sobre todo en las últimas semanas.

Al club no le queda otra que aguardar la decisión final del internacional británico. Lo peor es que todavía puede demorarse en el tiempo un mes y medio más. Y es que así lo estipula el contrato entre Freeland y el Unicaja. En él hay una cláusula que le permite salir cada verano hacia la NBA (Portland es la franquicia que tiene sus derechos) previo pago de algo más de un millón de euros. Se especifica, una fecha límite para tomar esa decisión: el 10 julio. Hasta ese día, Joel puede elegir si quedarse en Málaga o intentar la aventura americana.

El Unicaja vigila el mercado... por si acaso. Además de su posible salida hacia la NBA, también hay equipos europeos que tienen al inglés en su punto de mira. En este caso sería cuestión de negociar entre las partes. Incluso podría seguir en la Liga Endesa y no en Málaga, si es que el Barcelona se decide por él para reforzar su juego interior, que tendrá varias bajas al finalizar la presente temporada.

Pero la amenaza más real parece la de los Trail Blazers, franquicia poseedora de sus derechos. Los Blazers eligieron a Freeland en el puesto número 30 del draft del 2006 y siempre han contado con él de cara al futuro. Portland envió a tres miembros de su staff para verlo en directo en la cancha del Gescrap BB y también en varios entrenamientos de vuelta a Málaga. En Bilbao, coincidiendo con la penúltima jornada de la Fase Regular, estuvieron Jason Filippi, habitual durante la temporada en el Martín Carpena, acompañado por Chad Buchanan, virtual general mánager y un colaborador suyo.

El jugador, en una entrevista en La Opinión de Málaga hace un par de semanas, dejó claro que no tiene claro su futuro y aseguró que puede pasar cualquier cosa. «Tengo que hablar con mi agente sobre todas estas cosas. Ahora que tenemos tiempo libre, hablaré con él y habrá que mirar todas las opciones. Yo quiero ganar algo y si puede ser en este club, mejor para mí [€]Tengo contrato aquí y sólo estoy pensando en estar aquí. Como todos los jugadores, yo también quiero estar en la NBA. Si tengo la oportunidad este verano... No sé. No puedo decir sí ni decir no», afirmó.

Buchanan no escondió días atrás sus intenciones sobre Freeland. «Realmente nos gustaría traerlo», dijo al rotativo The Oregonian. «Vamos a ser agresivos a la hora de intentar su contratación ya que queremos que vista la camiseta de los Blazers la próxima temporada. Vamos a hacer todo lo posible. Está claro que el acuerdo tiene que ser beneficioso para todos, pero si tenemos la oportunidad, queremos contar con él», afirmó de forma tajante.

Será cuestión de esperar. En Los Guindos no se ponen nerviosos, de momento. Freeland ha sido la piedra angular del proyecto de la pasada campaña y será pieza importante en el próximo curso si se queda. Si no, el dinero que se ingrese por su cláusula deberá de servir para buscar al mejor sustituto posible.