Juventud, veteranía y renovación son las palabras clave que marcan al Estudiantes de Madrid a la hora de afrontar el comienzo de la nueva temporada del baloncesto español. El club colegial vuelve a apostar por los jóvenes y por su inagotable cantera de cara a la Liga Endesa que comienza el próximo fin de semana y que afronta con seis jugadores procedentes de la misma. Pero también lo hace por la veteranía de alguna de sus incorporaciones. Que los tres ingredientes funcionen será tarea de Txus Vidaurreta, en su segundo año en la histórica entidad.

Si seis vienen de las categorías inferiores del club, Jaime Rodríguez, base; Lucas Nogueira, pívot; Fran Guerra, pívot; Edgar Visedo, escolta; Juancho Hernangómez, ala pívot; y Dario Brizuela, escolta (estos dos últimos con ficha del filial), cinco han sido incorporados el pasado verano: Xavi Rabaseda, Marko Banic, Dejan Ivanovic, Quino Colom y Andrés Miso, que regresa al club en el que debutó en la ACB tras ocho años en distintos clubes de la máxima categoría del baloncesto español.

El Estudiantes será el primer rival del Unicaja en el Martín Carpena, el domingo a las 12.15 horas. La entidad del Ramiro de Maeztu aspira a repetir plaza en la Copa y a clasificarse entre los ocho primeros para poder entrar en los play off. Para ello será fundamental que funcione la fórmula a la hora de mezclar a los veteranos, en su mayoría los fichajes, con los jóvenes, los de la cantera, algo que con otros hombres no dio resultado hace dos temporadas. Quizás porque los mayores estaban muy mayores y los jóvenes lo eran demasiado. La aportación de Kyle Kuric será muy importante.