La Euroliga vuelve al Martín Carpena. El baloncesto de elite regresa a casa. Málaga saborea, con esta edición, 14 temporadas ya de la máxima competición continental. Un lujo, se mire como se mire, y un éxito de todos: patrocinador, club y afición. Y el debut en casa, tras una buena actuación con derrota en Atenas, es motivo de fiesta. Acudir hoy al Carpena a ver al equipo, a continuar palpando su progresión y el camino que transita, es cita obligada esta noche (20.45 horas) ante un rival, el Zielona Gora, que no tiene el pedigrí de los grandes clubes pero que es el campeón de Polonia. Y merece respeto.

La Fase Regular de la Euroliga, a sólo 10 partidos, no permite ni un solo despiste. Ganar en casa es una obligación. Y más al cuadro polaco que, a priori, parte como la «Cenicienta» de un Grupo C muy igualado, en el que el campeón griego asaltó ayer la pista del Galatasaray turco (67-78) y comenzó a dictar su ley. Así que hoy no hay otra ecuación que la que lleva al triunfo. Los cinco encuentros de casa hay que sacarlos adelante como sea. Porque en un grupito de sólo seis equipos, a 10 partidos, toca meter sí o sí la cabeza entre los cuatro mejores. Así que con Galatasaray, Bayern Múnich y Siena habrá que luchar, toda vez que el Olympiacos parece destinado a salir campeón y que los polacos no son nada del otro mundo. En el debut cayeron en casa de forma estrepitosa (73-94) ante los alemanes de Múnich.

El Stelmet es un equipo anárquico, que vive del perímetro y del acierto de sus exteriores. Un equipo al que que le gusta muy poco defender y que pretende ganar los partidos anotando más puntos que su rival. O sea, una política completamente diferente a la del Unicaja. Si los de Joan Plaza logran imponer su presión defensiva y salen al contragolpe como lo hicieron ante el Estudiantes o en Sevilla, la cosa comenzaría a pintar más que bien. Sería una fantástica tarjeta de presentación. Trabajo, disciplina y defensa ante la anarquía polaca.

En la convocatoria verde cambian pocas cosas. Toolson ultima su recuperación del tobillo y Urtasun sigue de baja. Ninguno jugará hoy. Tampoco Luis Conde, el joven del Clínicas. Dejan Todorovic se ha entrenado esta semana con el Unicaja, pero en principio jugará con el conjunto vinculado, a las 19.00 horas en Carranque. No está descartado que acabe el partido y se marche al Carpena, donde llegaría quizá con el choque ya empezado, pero no habría problemas pues se le inscribiría en el acta. Hoy se resolverá ese asunto.

Uno de los grandes atractivos del partido será ver en el palco de autoridades a Arvydas Sabonis, el mítico pívot lituano. Y es que su hijo pequeño, Domantas, es uno más del equipo malagueño y su padre le verá hoy de cerca en el parqué. Y toda la afición malagueña podrá contemplar a toda una leyenda, uno de los mejores jugadores europeos de toda la historia. Ojalá que su presencia traiga suerte al joven Domas, que está firmando un prometedor inicio de carrera.