Joan Plaza se mostró tranquilo en la rueda de prensa posterior al partido, a pesar del triunfo del equipo cajista, y recordó -otra vez- el pasado reciente del Unicaja y sus derrotas ante el Obradoiro para ensalzar el triunfo ante los gallegos. «Si este equipo había ganado los últimos años aquí era por algo. Es un buen equipo, bien entrenado y al que cuesta superar. Nadie nos lo va a poner fácil. Tenemos que jugar nuestro partido, no jugar a intercambiar canastas con los rivales. No podemos fallar tanto debajo del aro. Hay lecturas malas y también buenas. Es positivo, por ejemplo, que todos los jugadores han anotado y que cinco jugadores hicieron 10 o más puntos. Estoy satisfecho por las seis victorias seguidas y vamos a por más», aseguró el catalán.

El entrenador verde está muy satisfecho por la buena posición del equipo en la clasificación. «La gente debe estar orgullosa y contenta. Vamos cuartos. No sextos ni novenos. Es motivo para estar contentos. Jugamos con mucha gente saliendo desde el banquillo en momentos importantes...».

Plaza no se conforma y quiere más de aquí al final de la Liga Regular. «De los cinco partidos que quedan queremos ganar los cinco. Y si no, cuatro. El equipo está dando la cara. Éste era un partido trampa. De esos que se pierden muchas veces», aseguró.

A pesar de su ambición, el coach no se pone como reto alcanzar al Barça e intentar ser terceros. «Al Barcelona le queda un partido pendiente. Nosotros tenemos que hacer nuestro trabajo. Ahora hay que ganar al Manresa. Lo que debe hacer el Unicaja es lo que depende de sí mismo. Hay que quedar lo más arriba posible. También es importante llegar bien al play off. A tres partidos será peligroso cualquier cruce: Herbalife, CAI, Baskonia o hasta el Joventut. A siete partidos siempre gana el mejor, pero a tres puede haber sorpresas».

Por último mandó un mensaje de condolencia a la familia de Tito Vilanova, fallecido la tarde del viernes en Barcelona. «Sabéis que soy amigo de Pep Guardiola. Tuve la suerte de coincidir con Tito Vilanova en algunos entrenamientos o en algunas charlas. Es una putada enorme que alguien con 45 años se vaya. No vale la pena en pensar excesivamente. Tenemos que ser positivos, vivir la vida con alegría y ayudar a los que están a nuestro alrededor. Somos unos privilegiados por estar aquí. Le mando mi máxima condolencia a su familia. Ojalá los demás seamos más simpáticos -yo el primero- y estemos más contentos de estar aquí», finalizó.