­La planificación del Unicaja podría sufrir un serio revés en las próximas horas. El FC Barcelona ha contactado con Joan Plaza, a través de su agente, para comunicarle que está dentro de sus planes de futuro, saber su situación contractual en el Unicaja y preguntar cuál sería su disposición para cambiar Málaga por Barcelona. El Barça cerró anoche un año en blanco, tras perder la final de la ACB contra el Real Madrid, y los acontecimientos podrían precipitarse en las próximas horas.

Joan Plaza se marchó ayer de Málaga con destino, precisamente, a su ciudad, y lo hizo con cierto regusto amargo, porque esperaba un «gesto» del club antes de marcharse de vacaciones.

El entrenador del Unicaja renovó en septiembre su contrato en Málaga, que expirará el 30 de junio de 2016. Plaza esperaba que el club diera otro paso al frente durante el último mes, antes de comenzar con la locura de los play off, para plantearle una mejora salarial o una nueva renovación. Su agente, José Ortiz, ha viajado a Málaga en varias ocasiones, a colación del fichaje de Dani Díez, y también se tocó ese asunto, pero el club decidió no abordarlo. La pretensión ha sido iniciar ya entonces las renovaciones (Jayson Granger) y los contactos con otros jugadores (Edwin Jackson, Jamar Smith o el propio Díez), y dejar la negociación con Plaza para la vuelta de la pretemporada.

Estos tiempos no han gustado al técnico y tampoco el discurso del club sobre su continuidad en la entidad. Especialmente porque Plaza rechazó hace unos días una propuesta del Emporio Armani Milan para marcharse al equipo más rico de Italia.

La Opinión informó esta semana que su cláusula de rescisión es de 140.000 euros, una tara que cualquier club importante puede sortear sin ningún problema. Y ahora es el propio Barça quien estaría dispuesto a hacerlo.

Xavi Pascual llegó al equipo blaugrana en 2008 y desde entonces siempre ha ganado al menos un título por año. Ahora se ha roto su excelente racha y su puesto peligra seriamente, porque la distancia con el Real Madrid se ha estirado peligrosamente, a pesar de la millonaria inversión del Barça en la sección de básket. El catalán renovó su contrato a comienzos de 2015 por dos temporadas más, hasta el 30 de junio de 2017.

Su continuidad está en el alero, aunque el Barça se encuentra ahora en pleno proceso electoral, lo que sin duda ralentizará cualquier decisión seria y, sobre todo, costosa. Y prescindir de un técnico como Xavi Pascual, con su caché y dos años firmados, no es para nada baladí. Las elecciones en Can Barça están programadas para el próximo 18 de julio.

Plaza llegará hoy a casa y esperará acontecimientos. El entrenador ha sido y es muy feliz en Málaga y ha diseñado la próxima plantilla, pero no se siente valorado económicamente. Suele hablarse en sus círculos próximos que su ficha es más baja que la de Jasmin Repesa. Plaza esperaba y deseaba ese «gesto» que no se ha llegado a producir. Ahora está en mercado, el Barça se lo piensa y los «grandes» de Europa saben que su salida de Málaga sólo cuesta 140.000 euros.