Mientras se celebraba ayer al mediodía la asamblea de la ACB, con responsables de Unicaja y Barcelona sentados a escasos metros, la ACB hacía oficial el listado de jugadores sometidos al derecho de tanteo, entre los que se encontraba Marko Todorovic. Un obstáculo importante, ya que el Unicaja y el agente del pívot, Ígor Crespo, habían avanzado en las conversaciones mantenidas el martes, dado el interés que el propio pívot, de 2,10 metros, había mostrado por venir al Unicaja y jugar la Euroliga.

El caso es que el Barça le ha hecho una oferta en firme para que renueve en el club, pero Xavi Pascual no cuenta con Todorovic, ya que tiene en la cabeza que su juego interior lo compongan Tomic, Lawal, Diagne, Doellman y Vezenkov. Algunos ya en el club, otros casi fichados y alguno en proceso.

Lo que pretende el Barça es utilizarle como moneda de cambio por el escolta del Valencia Basket, Pau Ribas. Los dos clubes desean intercambiarse los derechos de los dos jugadores, por lo que el Valencia también ha realizado una oferta cualificada por Ribas.

Sin embargo, Todorovic no quiere irse a Valencia y quiere fichar por el Unicaja, como ayer explicó La Opinión. Su agente y el Unicaja tienen un acuerdo muy avanzado por tres temporadas -no está cerrado-, con un montante superior al millón de euros. Todorovic, que es cupo de formación, ocuparía el lugar de Loukas Mavrokefalidis, que sigue sin deshojar la margarita, a la espera de que el Panathinaikos le pase una oferta.

El Unicaja se ve obligado ahora a negociar con el Barça por los derechos del jugador, aunque Ígor Crespo ya ha comunicado a los responsables de Los Guindos que está dispuesto a sacar del Barça al pívot de Podgorica, que no quiere irse al Valencia Básket y sí desea fichar por el Unicaja para jugar la Euroliga y poder mostrarse de cara a su salto a la NBA.

Eduardo García, presidente del Unicaja, estuvo ayer en Barcelona, y compartió mesa con Juan Carlos Reventós, director de secciones del club blaugrana. El Barça se encuentra en un momento muy delicado, en pleno proceso electoral, por lo que es complicado entablar negociaciones fructíferas con ellos, mucho menos una conversación para discutir la salida de Marko Todorovic.

Sobre todo porque el Valencia está al acecho. Si nos atenemos a lo que dicen las reglas del juego, a partir de ahora debe ser el Unicaja y el jugador los que muevan ficha. El pívot tiene desde hoy, 8 de julio, al próximo 19 de julio (12 días naturales) para presentar en la sede de la ACB una única oferta de un club. Una vez presentada la oferta, el Barça dispone de cinco días improrrogables para ejercitar el derecho de tanteo o no hacerlo.

O sea, que Todorovic deberá presentar un contrato suscrito por el Unicaja de aquí al día 19. Es importante el detalle, porque si lo hace, el pívot no jugará, pase lo que pase, en el Valencia. La normativa impide al Barça traspasarle después a un tercer equipo, si es que ejerciera ese derecho a igualar la oferta en el tanteo.

Mientras tanto, en Grecia, Loukas Mavrokefalidis continúa con una oferta en firme del Unicaja, por dos años y 850.000 euros. El pívot tiene ese ofrecimiento desde hace ya una semana. La oferta no es vinculante, ya que es una carta en la que se presenta el ofrecimiento y las cifras del compromiso. No se trata de un contrato firmado, no es vinculante. Aunque si el jugador la aceptara, el club estaría por la labor de dar luz verde, ya que Plaza dio su visto bueno en su día.

Mavrokefalidis se complica. El problema es que todo sigue igual. Mavrokefalidis prosigue esperando a que el Panathinaikos mueva ficha, y ya dijo en una televisión griega que su «prioridad» era el PAO. El serbio Djordjevic está moviendo hilos y tratando de fichar a su compatriota Miroslav Raduljica para el puesto de pívot titular, y hasta que no cristalice esta operación no sabrá con qué dinero cuenta para pagarle a Mavrokefalidis. Y es que el pívot pretendido por el Unicaja tuvo este curso un salario de 600.000 euros netos... Un escándalo.

Además, Djordjevic también está pendiente de la continuidad del joven gigante Giorgos Papagiannis, de 2,16 metros, con ofertas para irse a la NCAA. Kentucky, St John’s y NC State. El también seleccionador serbio tiene en la recámara a Stephane Lasme, que sale del Anadolu Efes. El Unicaja está cansado de esperarle.