El Unicaja ha comenzado a estudiar con especial interés el mercado de hombres altos, de pívots de más de 2,10 metros. Un perfil de jugador que se echa de menos en el actual equipo y que se vigila de cerca. El primer mes de competición ha dejado a la luz algunas debilidades del equipo. Y, por el momento, la que más preocupa es esa ausencia de un hombre grande, con centímetros y kilos. Los malagueños han sufrido ya en sus carnes a los pívots rivales de equipos importantes. El impacto que tuvo Bourousis en el juego del Laboral Kutxa fue clave en la derrota final, la primera de este curso.

Antes, la capacidad atlética de Trevor Mbakwe, pívot del Maccabi Tel Aviv, también había traído de cabeza a los hombres altos del equipo, pero la gran victoria en La Mano de Elías desvió cualquier foco. Mbakwe fue un quebradero de cabeza (17 puntos y 25 de valoración) como lo fue la pasada semana el pívot turco Semih Erden. El exNBA, de capa caída ya, campó a sus anchas en la zona malagueña, con 17 puntos y 9 rebotes.

Lo cierto es que los pívots cajistas están sufriendo mucho en defensa. Fran Vázquez no está al nivel que ha mostrado a lo largo de su carrera. El pívot de Chantada atraviesa un bache, del que saldrá adelante más pronto que tarde. Eso sí, aunque esté en plenitud, el gallego siempre ha sufrido ante pívots más pesados. Él tiene otras virtudes: salto, intimidación, juego por encima de los aros, tiro...

Cuando se fichó a Richard Hendrix se asumió que se contrataba a un pívot pequeño, pero de una calidad excepcional. Con lo que no se contaba era que Hendrix viniera en un nivel físico precario, al margen de sus problemas de rodillas. Este cóctel hace que no sea recomendable que permanezca demasiados minutos en pista, y que sufra cuando juega el segundo partido de la semana, porque no recupera bien.

Aunque Germán y Will Thomas pueden echar una mano puntual, ninguno es un pívot grande, un «siete pies». La plantilla se cerró, aunque el club guardó una cantidad económica destinada a posibles reformas en el plantel, especialmente por si llegaban largas lesiones. No es el caso, pero existe la opción de, ahora al comienzo de curso, completar el roster para no tener que sufrir en el futuro un problema detectado ya.