El próximo 23 de junio, en el Barclays Center de los Brooklyn Nets, se celebrará el draft de la NBA, el sorteo universitario en el que las franquicias escogen a los mejores jugadores de la NCAA. Y en ese gran día para la NBA podría estar presente, con un protagonismo importante, Domantas Sabonis. El periodista Jeff Goodman (ESPN) informó ayer de que el pívot de la Universidad de Gonzaga quiere declarse elegible.

Aunque eso no significa que vaya a ser drafteado este verano. Tras pasar sólo dos de los cuatro años académicos, él puede declararse elegible hasta el próximo 24 de abril y, si los entrenamientos privados con las franquicias no van bien o baja su posicionamiento en el draft, podría aún retirar su candidatura hasta el 25 de mayo.

Eso sí, todo esto podría cambiar si firma un contrato con una agencia de representación. En este caso, el jugador de Gonzaga ya no podría dar marcha atrás. Si se enrola con una agencia, la normativa le impediría regresar a jugar a la Universidad de Gonzaga. Él y su familia deben decidir. La voz de su padre, el mítico Arvydas Sabonis, será clave. Las webs cada vez le sitúan en un puesto más puntero, dentro ya del «Top 10».