­El Unicaja va a apurar sus opciones para tratar de arrancar un acuerdo con el pívot checo Ondrej Balvin, pero es consciente de que el tiempo corre en su contra y de que el jugador del Sevilla Básket va a tener un rosario de ofertas con las que va a ser muy difícil competir. Balvin, de 2,17 metros y 23 años de edad, trabaja en entrenamientos privados mostrándose a ojeadores de franquicias de la NBA. Sigue en Phoenix, consciente de que una vez que se celebre el draft, a finales de este mes, se abrirá una época agitada de fichajes y transacciones en la NBA que vivirá su culmen en la Liga de Verano de Las Vegas, donde él jugará.

El Unicaja ya sabe por boca de su agente, Phillip Parun, que su ofrecimiento es bien recibido por él y por el jugador, pero que Balvin va a apurar todas sus opciones de poder jugar en la NBA. Y que, si no fructificase esta opción, ya tiene sobre la mesa el interés de varios clubes de Euroliga. Después iría el Unicaja, que tras 15 temporadas en el máximo escenario continental, pasa a la Eurocup, el segundo escaparate europeo. Y eso pesa.

Lo llegó a confesar ayer el secretario técnico del Unicaja, Carlos Jiménez. «Los tiempos son un poco complicados al no estar en Euroliga. Piden más tiempo los jugadores. La Euroliga representa mucho y también hay jugadores que esperan por la NBA», explicó el directivo.

La opción Balvin es difícil, muy compleja. Aunque Joan Plaza ha telefoneado ya al pívot y existen buenas sensaciones, en Los Guindos son conscientes de las dificultades que entraña la negociación. Y en la lista de opciones hay un jugador marcado en rojo, cuya contratación ha de cocerse a fuego lento, pero que gusta y está sobre la mesa. Su nombre es conocido en Málaga: Augusto Lima. «Gus», criado y formado en Los Guindos, gusta al cuerpo técnico y cumple con los parámetros que busca el club.

La opción de Balvin es muy real y se le quiere porque en la entidad son conscientes de que es un jugador con un crecimiento brutal, al que el próximo curso se le puede sacar muchísimo dinero en concepto de traspaso. Pero no es menos cierto que con Dejan Musli ya fichado, hay un pívot grande, un siete pies, que equilibrará el juego interior. Y los gustos de Plaza van más encaminados hacia un pívot más pequeño y más móvil y rápido, que sea capaz de jugar al ritmo alto que le gusta al técnico, que cambie en defensa sin sufrir, que corra el contragolpe. Y Lima es ese hombre. Hay que recordar que el pasado verano ya se negoció con su agente, David Carro, pero había que pagar una cláusula alta más su ficha. Y se salía de presupuesto.

Ahora Lima, que llegó en invierno al Madrid, podría salir cedido o traspasado. Hay overbooking en la zona blanca y Lima tiene la puerta abierta de salida y entrar en algún intercambio de favores con el club blanco, con el que hay una gran relación, y jugadores que suenan, como Fran Vázquez o Jay Granger (tanteo). Lima está en la agenda.