Jayson Granger ha sido un nombre que las últimas semanas ha estado encima de la mesa del despacho del secretario técnico del club, Carlos Jiménez. De hecho, cada vez que Joan Plaza ha hablado de la posibilidad de fichar solo un base este verano, pero del máximo nivel, el único nombre que se escondía tras ese deseo era el del uruguayo, ahora en las filas del Efes turco.

Granger firmó hace justo ahora un año un contrato por dos temporadas en el vigente subcampeón de la Liga turca, tras dos cursos de éxitos en Málaga. Estos últimos 12 meses han sido muy duros para «Jay», que no ha acabado de aclimatarse a la gran urbe turca ni al club cervecero. A pesar de tener una temporada más de contrato, el jugador está dispuesto a regresar a la Liga Endesa y en el Efes tampoco parece que vayan a poner muchas pegas a su hipotética salida. De hecho, Velimir Perasovic, nuevo entrenador de los otomanos, ha deslizado que le gustaría llevarse con él a Estambul a Darius Adams para ser el director del equipo.

El caso es que hace algo más de un mes, en Los Guindos pidieron a Granger un vídeo promocional para una actividad del club. El exbase cajista aprovechó para enviar un mensaje a los rectores verdes: «Sacadme de aquí», decía, mitad en broma mitad en serio.

El club, que sabe que acertar en el puesto de base será una de las claves de lo que ocurra la próxima temporada, pensó entonces en estudiar el posible retorno del uruguayo a Málaga. Jiménez contactó con su agencia de representación, U1st, pero las conversaciones no han avanzado porque la operación es imposible de asumir económicamente para la entidad costasoleña.

Granger tiene firmado en el Efes un contrato superior al millón de euros, su deseo de volver a España es firme, pero no a cualquier precio. Según informaron sus representantes al club verde, el caché del jugador está en torno a los 750.000 euros netos para este próximo curso, o sea, algo más de 1.1 millones de euros coste club, una cifra que el Unicaja no puede pagar ni por Granger ni por nadie.

Así las cosas, el Unicaja apostará por firmar ahora dos bases de menor pedigrí (Fogg y otro), mientras Jayson Granger decidirá en los próximos días qué hace con su futuro. Aunque ahí el Unicaja también tendrá mucho que decir. Y es que el jugador fue sometido a tanteo el pasado curso cuando acabó contrato en el equipo cajista, por lo que sí vuelve a cualquier club de la ACB tendrá que ser previo acuerdo con el Unicaja (económico o del traspaso de algún jugador) por tener sus derechos.

La página web Eurohoops informaba ayer del interés del Barcelona en el jugador, como recambio de Carlos Arroyo. También el Real Madrid quiere a Granger si el «Chacho» Rodríguez vuelve a intentar la aventura NBA. Incluso el Baskonia pretende que el uruguayo sea el recambio de Adams, si el americano no sigue en Vitoria.

Si finalmente fuera cualquiera de estos tres su destino, el club de Los Guindos sacaría tajada, algo inesperado, pero que puede ayudar a reforzar la plantilla verde de cara al próximo curso.

Está claro que Jayson Granger habría sido el fichaje perfecto para la campaña de abonados y para reflotar la moral de la tropa verde. En las oficinas del club son conscientes de que es un sueño imposible, pero al menos puede valer su vuelta a España para ganar unos euros que siempre vienen bien.