El malagueño Germán Gabriel ha hecho público un comunicado que viene sufriendo impagos de su actual club, el Marinos de Anzoátegui y que, "con el corazón roto", ha decidido acudir a la FIBA, denunciar a su equipo por impagos y abandonar la entidad venezolana. El ala-pívot formado en Los Guindos renunció a su contrato en el Unicaja, de dos años garantizados, porque no se sentía útil para el equipo y quería seguir jugando minutos de calidad. Por eso, cuando la temporada apenas llevaba un par de meses, comunicó su decisión y llegó a un acuerdo para romper su contrato con el Unicaja.

Tras un tiempo sin competir, le llegó la oferta de Marinos de Anzoátegui de su Venezuela natal, y la aceptó. Ha sido una temporada complicada para él, porque sufrió una lesión en un codo que le obligó a perderse parte de la temporada. Al resbalarse sobre el parqué se clavó una astilla en el codo, esa herida creó una infección en el hueso e incluso tuvo que regresar a España para recibir tratamiento médico. Cuando se recuperó regresó a Venezuela para disputar la recta final del curso.

Ahora, Germán denuncia que ha sufrido impagos: "Ante la ausencia por parte de Marinos de un planteamiento real sobre cómo se resolverán los impagos producidos a lo largo de toda la temporada nos hemos visto obligados a comenzar los trámites con la FIBA y denunciar la situación", explica en una nota hecha pública en su cuenta de Twitter.

"Con el corazón roto, me veo obligado a tomar la difícil decisión de poner fin a mi relación laboral con dicho club", continúa, antes de dar las gracias a la afición y a las personas del club.