Berni Rodríguez ya ejerce en los despachos. El viernes de la semana pasada, el malagueño anunció su retirada de las pistas y desde la tarde del miércoles ya es oficialmente el nuevo director deportivo del Baloncesto Sevilla. El excapitán cajista atiende a La Opinión de Málaga sin tiempo casi para cogerle el aire a sus nuevas atribuciones profesionales.

Se va a hacer raro ver a Berni Rodríguez en los despachos y no en las pistas...

Sí. Después de 17 años... Es algo que venía madurando desde hace algún tiempo. No es una cosa que se me ha ocurrido de repente. Al final de la pasada temporada hablé con el presidente, es una figura que no había en el organigrama del club desde que se fue Galilea y nos la propusimos mutuamente.

¿Por qué se retira Berni, si físicamente está bien y la mayor parte de sus compañeros de generación siguen activos al más alto nivel?

Es verdad que físicamente estoy bien, pero las cargas de trabajo son grandes, son muchos años y ya estoy cansado. También siempre tenía en mente que quería seguir vinculado al mundo del baloncesto sin tener que parar. Pasar de jugar a otra función sin margen de tiempo. Y ahora he podido

Después de 17 años en la elite, ¿le ha costado tomar la decisión?

Por supuesto. Es algo complicado. Da vértigo. El primer día que lo dije a mi entorno fue difícil. La vida del deportista es muy sencilla: te llevan, te traen... te lo hacen todo. Lo único que depende solo de ti es el rato que juegas al baloncesto. Ahora, como director deportivo, no hay nadie que te maneje. Es una situación totalmente diferente. Y da vértigo. Mucho vértigo.

En la hora del adiós, elija un partido, solo uno, de toda su carrera. ¿Cuál?

Es muy difícil. Probablemente haya jugado unos mil en total. No sé, ya que estamos hablando de mi retirada, elijo el primero como jugador de la primera plantilla del Unicaja, inaugurando el Martín Carpena, contra el Bascelona, en septiembre de 1999. Cuando me fui del Unicaja me regalaraon una foto de ese primer partido en la que salgo junto a Nacho Rodríguez y le tengo mucho cariño porque representa un poco el inicio de todo. Jamás pensé aquel día lo que iba a pasar después con títulos, minutos, rol importante en mis equipos... No fue un partido bueno para mí. Hice 5 faltas en 7 minutos, pero fue el inicio de todo lo que ha venido después.

¿Y un entrenador?

Es muy difícil. Por nombrar a alguien, por importancia, mi padre. Él fue el que me llevó a Los Guindos de la mano. Pero por decir a uno profesional, quizás Sergio Scariolo porque con él ganamos la Liga y la Copa. Pero soy injusto porque Bozidar Maljkovic también fue muy importante, por ejemplo. Ya que quieres que me arriesgue, pues digo a Scariolo porque fue una gran época deportiva.

¿Y un compañero?...

Afortunadamente me llevo muchos amigos con los que he vivido grandes momentos. Quizás Germán Gabriel porque hemos ido de la mano desde muy pequeños y nos hemos alegrado mucho de los éxitos el uno del otro. Es un gran jugador y un muy buen amigo.

¿Qué jugador es el que más le ha costado defender? Ése que cuando lo veía en la pista en la rueda de calentamiento ya sabía que le iba a amargar el día

Aquí me vienen a la memoria muchos. Te voy a decir tres: Igor Rakocevic, Arvydas Macijauskas y Juan Carlos Navarro. No nombro ni a Marcus Brown ni a JR Holden ni a Serkan Erdogan ni a Trajan Langdon o al mismísimo Kobe Bryant, que también eran...

El tiempo lo cura todo, pero ¿le dolió en su momento no renovar con el Unicaja?

Por supuesto. Quería seguir en Málaga, todo el mundo lo sabe, pero no se dieron las circunstancias. Dice un amigo mío que hay que dar tres pasos atrás para ver el cuadro completo y ahora, con el paso del tiempo, salir de Málaga me ha dado esa oportunidad. A día de hoy soy una persona feliz y muy completa.

¿Qué ha significado Sevilla en este último tramo de su carrera profesional?

Cuando llegué sabía que iba a ser mi último destino por edad. Tengo mucho feeling con la gente de aquí. Es un buen proyecto para poder empezar de cero. Sigo en Andalucía, cerca de Málaga y me siento muy querido en Sevilla.

Fichar a Zan Tabak como entrenador ha sido su primera decisión ejecutiva. ¿Por qué el croata es la mejor opción posible para liderar al equipo sevillano desde el banquillo?

Teníamos varias opciones y pensando en lo que queremos, se han reunido muchos requisitos: conoce la Liga, la ciudad, me gusta su estillo de juego, con jugadores jóvenes que tienen que progresar desde el día 1. Vamos a hacer un juego alegre, sencillo, seguir con la dinámica de los últimos años. También es un muy buen conocedor del mercado.

¿A qué puede aspirar el nuevo Baloncesto Sevilla en la Liga Endesa?

Somos conscientes de nuestras limitaciones y no queremos pasar ningún apuro. Queremos ser ambiciosos, pero con los pies en el suelo.

Usted siempre ha presumido de malaguista. ¿Ahora será también del Betis?

Aquí hay un gran debate siempre entre Betis y Sevilla. Nosotros queremos que la gente en Sevilla sea del baloncesto, se llame como se llame el equipo. Yo seguiré siendo del Málaga CF, pero ahora también seré del Betis.

Mucha suerte, capitán.