El Unicaja recibe este mediodía de domingo al Retabet Bilbao Basket en el Palacio Martín Carpena con el objetivo de acercarse un pasito más a la Copa del Rey, cita para la que solo habrá billete el final de la primera vuelta para los ocho mejores.

Los verdes, octavos ahora en la clasificación, es decir en el límite entre el bien y el mal, se la juegan ante el sexto de la tabla, un Bilbao Basket que empezó como un tiro esta Liga, pero que parece haber perdido algo de fuelle las últimas semanas.

Cajistas y vascos tienen a día de hoy el mismo balance de victorias/derrotas (4/2), lo que covierte este duelo dominical en el Palacio en un partido de esos en los que la victoria tiene un valor doble: el triunfo que sumas tú y el triunfo que deja de sumar tu rival directo.

Tras el fiasco copero del pasado curso, con la ausencia del Unicaja de la Copa de A Coruña 2016, el equipo de Joan Plaza no puede volver a fallar. Y para estar en la cita del k.o del próximo mes de febrero es necesario, sobre todo, que el equipo se haga fuerte en casa, al amparo de su «marea verde». Por eso estamos ante 40 minutos importantísimos para encarar lo que ya será el esprint final de la primera vuelta.

Quizás sea un poco pronto para echar las cuentas de la lechera. Pero tras pasar el Bilbao por Málaga solo quedarán 8 jornadas más para llegar al corte. Estaremos justo en el ecuador de la primera vuelta. Los verdes suman ahora 4 victorias, que podrían ser cinco en caso de ganar a los «hombres de negro». Se estima que con 8 y un buen average (diferencia entre puntos a favor y puntos en contra) podría bastar para estar en Vitoria. Lo que parece seguro es que con 9, el objetivo estará asegurado. O sea, que ganando al Bilbao Basket faltarían «solo» 3 ó 4 triunfos más y habría ocho jornadas todavía de margen. Una situación muy interesante, sobre todo después de tantos vaivenes, tanta irregularidad, tantas lesiones y tantas dudas.

El Unicaja afronta el partido rearmado de moral tras lo del miércoles frente al Zenit, pero con bajas y molestias varias. A la ya habitual ausencia de Nedovic se une esta matinal dominical la de N´Diaye, que no se ha recuperado a tiempo de sus problemas físicos. El que parece que sí estará ante los vascos es Dejan Musli, aunque lo hará mermado después de entrenar solo un día de los tres últimos debido a esa gastroenteritis que ya le impidió jugar entre semana ante el Zenit.

Smith ha mejorado de sus problemas estomacales, pero también habrá que ver cómo está. O sea, que media plantilla está con problemas, lo que provocará ver otra vez a más de un jugador doblando esfuerzos en más de una posición en la cancha para cubrir ausencias y compañeros mermados de fuerzas.

Al otro lado de la pista espera este fin de semana un Retabet Bilbao con problemas en la Eurocup (es último de su grupo), pero bien posicionado en la Liga en busca del billete copero. Con dos clásicos como Mumbrú y Hervelle, el rival presenta este curso caras nuevas peligrosas como el tirador ex del Sevilla Scott Bamforth y Michael Eric, un prodigio de la naturaleza nigeriano, que es el referente de los vascos en la pintura en este nuevo proyecto 2016/2017. Eso sí, su cara más reconocible es la del canterano verde Dejan Todorovic, que ya desvinculado totalmente del Unicaja, es a todos los efectos un «hombre de negro» más.

Serán, seguro, 40 minutos duros, justo lo que necesita el equipo para reafirmar su mejoría respecto a esa minicrisis que, de ganar este partido al Bibao, habrá pasado a ser historia.