­El Unicaja tratará de dar la mayor normalidad posible a una semana atípica, en la que no tendrá partidos, ya que descansa, consecutivamente, tanto en Eurocup como en Liga Endesa. Diez días de parón, hasta que el miércoles 23, ante el Buducnost en el Carpena, vuelva la acción. Sin embargo, el club no quiere distracciones y va a intentar que la semana sea como una más, sin parones, por supuesto, y tampoco con descansos anormales o miniconcentraciones, algo de lo que no es muy amigo Joan Plaza.

Por eso, el club ha preparado un encuentro amistoso este próximo miércoles ante el Fundación Granada de Liga LEB Plata, un encuentro que viene a sustituir al que no podrá jugar de Eurocup, ya que esta semana le toca descansar, debido a la reducción de equipos de la segunda competición continental. El equipo malagueño se verá las caras en la ciudad nazarí ante el Covirán Granada, donde está cedido el pívot rumano Cris Uta, y donde juega Carlos Cobos, que el pasado año militó en el Clínicas Rincón. El equipo granadino viene de perder en León (79-74), aunque es el líder de la competición, con seis victorias y dos derrotas, empatado con Lucentum, Ávila y Sammic.

El plantel viajará el mismo día de partido y regresará en autobús tras el encuentro, y Joan Plaza ha decidido darles descanso el jueves. Habrá sesión voluntaria el viernes. El equipo regresará al trabajo en sábado y domingo, para comenzar a preparar ya los partidos de la siguiente semana. No habrá, por lo tanto, fin de semana de asueto para la plantilla. El técnico quiere evitar así cualquier tipo de distracción y dedicará estos días a ir ensayando y probando nuevas cosas dentro del equipo.

La plantilla estará así «metida» en faena y no tendrá tiempo de desconectar, algo que Plaza no quiere, pues aún falta mucho por hacer y hay trabajo por delante. La semana que ha acabado ha sido muy satisfactoria, ya que se han ganado los dos partidos tras los tropiezos de la anterior, ante el UCAM y el Joventut. El Unicaja descansa, pero no tendrá descanso.