Hace tiempo, mucho ya, que los Unicaja-Barcelona trascendieron de la mera normalidad para convertirse en verdaderos acontecimientos. Al menos, aquí en Málaga. En Can Barça, a buen seguro, están preocupados de otras guerras, de batallas mayores. Que si el Real Madrid, que si el CSKA, que si la ACB, que si la Copa del Rey, que si la Euroliga, que si la Copa Cataluña. Pero aquí en Málaga, desde Ciudad Jardín al Carpena, la historia dice que hablar del Barça es nombrar a la «bicha». Desde aquella final de 1994/95. Con un montón de derrotas a las espaldas, pero con el triple de Pepe Sánchez siempre en la retina y en la memoria. Aquello fue historia del Unicaja. Y valió un pase a la Final Four.

Han crecido las diferencias entre unos y otros desde entonces. Ellos siguen teniendo la pasta por castigo y montan plantillas sensacionales todos los años, con mejores o peores resultados. Ahora andan en plena transición. De Xavi Pascual al griego Bartzokas. De Chichi Creus a De la Fuente. Aquí en Málaga las cosas han cambiado. El glamour de los Pepe Sánchez, Marcus Brown, Jorge Garbajosa o Dani Santiago se ha cambiado por Kyle Fogg, Adam Waczynski y Dejan Musli. Otros tiempos, pero se mantienen los objetivos de competir, luchar hasta el final y tratar de lograr alguna final. Acercarse a un título. Olisquearlo, cuanto menos.

Y en éstas llega el Unicaja-Barça de esta tarde, en un Carpena que no se llenará y que viene de ver tres victorias consecutivas de los hombres de Joan Plaza. Ante Zenit San Petersburgo, Bilbao y Buducnost. Ninguna es un rival comparable al Barça, pero ahora con la Eurocup, esa Euroliga de garrafón que hay que beber sí o sí esta temporada, los duelos con los «grandes» serán mucho más puntuales. Así que hoy toca reinventarse para dar un golpe en la mesa. Está delante el Barça y también la opción de acercarse a la Copa del Rey y lograr un triunfo motivador, que coloque al Unicaja definitivamente en el buen camino este curso.

El equipo cajista llega a esta cita liguera con cuentas pendientes. Porque aún busca el partido perfecto que no acaba de llegar y porque el Barça siempre es el Barça. Plaza tiene una ocasión magnífica de demostrar, además, que es el digno heredero de uno de esos banquillos imponentes en un duelo precioso con Bartzokas.

El Unicaja se presenta únicamente con la baja conocida de Nemanja Nedovic, que sigue dando pasitos cortos en su recuperación. Ya pudieron vestirse de corto tanto Carlos Suárez como Hamady N’Diaye ante el Buducnost, en un test menor de lo que está hoy por venir. Que va a ser algo muy gordo.

Mal en Europa, bien en ACB

Tras sumar ante el Galatasaray la tercera derrota consecutiva en la Euroliga (78-64), el Barcelona Lassa tratará de regresar a su «otro» mundo. Vive instalado el equipo entrenado por Georgios Bartzokas en una montaña rusa de resultados. Si en la ACB ocupa la segunda posición con el mismo balance (7 victorias y 1 derrota) que el líder, el Real Madrid, y con cinco victorias consecutivas; en la Euroliga la situación es diametralmente distinta, ocupando la duodécima posición, con cinco derrotas -las tres últimas consecutivas- en nueve partidos. El viernes ante el Galatasaray, Bartzokas recuperó a Doellman y Claver, si bien su actuación fue discreta debido, en parte, a la falta de ritmo después de más de un mes en el dique seco. Solo Tyrese Rice, líder azulgrana en este inicio de temporada, dio la cara con 24 puntos. «Debemos intentar que tenga el balón lo menos posible», dijo Alberto Díaz en la previa. Y es verdad, porque el americano es el principal motor azulgrana. Tratar de griparlo se antoja vital.

Echa de menos el estadounidense, que juega una media superior a los 30 minutos por partido, un escudero que le ayude a liderar la parcela ofensiva «culé». Prueba de ello es que el Barcelona es el equipo que menos puntos anota en la Euroliga (70,4), unos guarismos que mejoran en la competición española (83,38 puntos). Bartzokas no podrá contar con los lesionados Juan Carlos Navarro, Pau Ribas y Shane Lawal. Tres bajas considerables. A estas ausencias se suma la de Doellman. El hecho de que en la ACB sólo se pueda inscribir a dos extracomunitarios ha obligado al Barcelona a escoger a Dorsey y Jonathan Holmes para este partido.

Llegan en crisis, por lo que se antoja una de esas angustiosas tardes en las que al Unicaja, ante un «grande» herido, le espera o la puerta grande y el éxtasis por rematar a un gigante herido o la enfermería por una herida fea y considerable.