Málaga, la afición del Unicaja y el propio club tenían ganas de echarse a la calle para celebrar un nuevo título que adorne sus vitrinas. Se notó que habían pasado 11 años desde que el Unicaja no festejaba algo importante, la «marea verde» no defraudó y quiso acompañar a su equipo desde Los Guindos a la plaza de la Marina en una vistosa caravana que tiñó de verde las calles de la ciudad para celebrar la consecución de la Eurocup.
La fiesta comenzó con retraso -siempre pasa en este tipo de celebraciones- y en Los Guindos, sede del club y donde esperaban todos los equipos de cantera del Unicaja para recibir a los campeones.
Así empezaron los actos de celebración protocolarios para festejar el título europeo conseguido el miércoles ante el Valencia Basket en tierras levantinas. Con una bonita ceremonia en Los Guindos, el equipo fue recibido por la cantera, principal activo de la entidad y que se ha querido ver reflejada en la figura de Alberto Díaz, base malagueño que fue nombrado MVP de la final.
No extrañó, por tanto, que el pelirrojo de 22 años fuera el jugador más aclamado por los jóvenes talentos del Unicaja y, a gritos de «¡MVP!», fue manteado por sus compañeros.
La plantilla campeona entró en el remozado recinto cajista al son de «Los Mihitas», que ayer sí pudieron desplegar todo su arte y apoyo al equipo con sus instrumentos, los mismos que el miércoles no pudieron utilizar en La Fonteta por órdenes del Valencia Basket.
Formando un pasillo para recibir a los campeones, los canteranos corearon el tradicional «¡campeones, campeones!. Una sonrisa de satisfación registraba cada una de las caras de jugadores, de Joan Plaza,de miembros del cuerpo técnico y directivos, acompañlados por familiares que en un segundo plano formaron parte de los festejos en la cancha principal del antes de comenzar la caravana hacia El Centro de la ciudad.
Cientos de personas aguardaban a la comitiva del Unicaja en las inmediaciones de la avenida Gregorio Diego -donde se sitúa la sede de la entidad verde- para ver como comenzaba la rúa del Unicaja y festejar con sus ídolo el título de la Eurocup.
Dos autobuses descapotables, uno para los jugadores verdes, cuerpo técnico y directivos, ataviados con unas camisetas conmemorativas que muchos aficionados se agolparon a comprar como recuerdo de un título ya inolvidable; y otro para familiares, Los Mihitas, patrocinadores y prensa, comenzaron el recorrido triunfal por las calles de Málaga para desenvocar en la plaza de la Marina.
Poco más de 30 minutos tardó la caravana verde en recorrer los cinco kilómetros que separan Los Guindos y la céntrica plaza malagueña. Un trayecto cargado de música y diversión por parte de los Mihitas y donde los jugadores ofrecieron el trofeo a aficionados y curiosos que siguieron la rúa verde.
Alen Omic, uno de los jugadores con más ganas de fiesta, acaparó el trofeo durante buena parte del trayecto y no faltaron las bromas, los selfies y las interacciones de los jugadores verdes a través de sus cuentas en las distintas redes sociales.
El autobús de los campeones no estuvo solo en su trayecto hasta el siguiente punto de la celebración. Varios aficionados escoltaron en motocicleta la comitiva triunfal y disfrutaron del recital que los Mihitas realizaron. No faltó ninguna de las canciones con las que levantan al Carpena los días de partido y también se acordaron, deportivamente, del Valencia Basket, rival al que Unicaja doblegó para sumar su segundo título continental.
Pero lo mejor aún estaba por llegar. Y es que, los jugadores del Unicaja «fliparon» cuando el autobús giró por la Plaza de la Marina y pudieron contemplar la marea verde que esperaban en frente de la sede de la entidad financiera al grito de «¡campeones, campeones!».
