Los play off siempre dan otra oportunidad. Y el Unicaja, tan sólo 48 horas después del primer partido de semifinales ante el Real Madrid, regresa esta noche al Wizink Center para tratar de igualar la eliminatoria. El 71-68 del miércoles todavía está muy reciente. El Unicaja firmó un gran partido en defensa, dejó sin anotar a Rudy o Carroll, pero en ataque tuvo muy malos porcentajes. El Madrid estuvo lejos de su mejor nivel. Tuvo poca alegría y chispa en su juego y sólo la aparición estelar de Sergio Llull, con 28 puntos (14 en el último cuarto) permitió a los blancos saldar con victoria el primer partido de la serie de semifinales.

Compitió el equipo malagueño hasta el último segundo. Hasta donde le dieron las fuerzas. Y las rotaciones, claro. Si Alberto Díaz está defendiendo excepcionalmente y, además, aporta en ataque. ¿Por qué retirarle si sólo jugó 22:44 minutos? Y si Nemanja Nedovic tiene que jugar 30 ó 35 minutos pues tendrá que jugarlos. El ejemplo es muy cercano. Sergi Llull disputó el miércoles 36:35. «Nedo» fue el cajista que más jugó con 23:17. Parece evidente que el Unicaja necesita lo mejor de sus jugadores para asaltar el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid. Y también está claro que Kyle Fogg debe ser hoy uno más en la rotación. Probarlo al menos. Darle la oportunidad de que sude y que pueda hacer sus tiros y sumar sus puntos. Y si no está al nivel exigido, como ocurrió en el play off ante Iberostar Tenerife, de vuelta al banquillo. Pero que no nos quedemos con la duda. Porque, a priori, el integrante del segundo mejor quinteto de la Eurocup debe ser una importante arma para el equipo.

También deben dar un paso adelante los hombres altos. Jeff Brooks debe ser más constante, buscarse sus tiros y sumar. El último gran partido que se le recuerda fue en la final de la Eurocup en Valencia. Plaza ha puesto ya por delante de la rotación interior a Viny Okouo antes que Dejan Musli. El serbio está falto de confianza. Se ganó sin él la Eurocup, pero ahora está. Se le espera. Y es necesario.

Como siempre en estas situaciones se puede ver la botella medio llena o medio vacía. Pensar que el Unicaja obligó al Madrid a jugar, a través de su gran defensa, un mal partido y anotar sólo 71 puntos. Jamás en la historia del baloncesto volverá a repetirse una situación como la del miércoles, con Carroll, Doncic y Rudy sin un solo punto en su casillero. Y, a pesar de eso, el Unicaja no pudo dar la sorpresa.

Parece obvio que para ganar hoy el equipo debe mejorar sus porcentajes de tiro, especialmente en la línea de tres, donde el Unicaja siempre encuentra mucho oxígeno en los partidos. El 29% (7 de 24) fue una pesada losa. Hubo buenos tiros, liberados, pero se erraron. Y si quieres ganarle al Madrid, y en su pista, has de bordarlo.

Pablo Laso tiene una plantilla de ensueño. Cualquiera te puede hacer un traje. Andrés Nocioni, que se jubila en menos de un mes, fue un martirio en el segundo cuarto. Ayón fue el protagonista del tercero y Hunter, del cuarto, siempre con Llull como maestro de ceremonias. Hoy pueden ser Ranolph o Taylor. O Doncic. O cualquiera... Volver a estar brillantes en defensa e impedir que el Madrid que se divierta, que corra, que juegue el pick and roll... El Unicaja ha demostrado que puede ganar en Vitoria, Tenerife, Valencia, Múnich o Krasnodar. ¿Por qué no en Madrid?