Las salidas de Jamar Smith, al que el Unicaja pagó 25.000 dólares para romper su contrato, y la de Kyle Fogg, que indemnizó al club con 125.000 dólares para marcharse a China, ha abierto un boquete en la línea exterior que el club trata de cerrar. Con un ojo puesto en la oferta al pívot Giorgi Shermadini que hoy «caduca» para el Morabanc Andorra, y atentos al mercado de bases (la gran preocupación actual del club), la secretaría técnica trabaja en buscar un recambio para el perímetro.

No hay prisas, porque el puesto está bien cubierto. El Unicaja cuenta con dos escoltas con contrato en vigor (Nemanja Nedovic y Dragan Milosavljevic) y otros dos aleros (Dani Díez y Adam Waczynski) y lo que busca ahora es un complemento. Un jugador que tenga un buen nivel en los dos lados de la zona, con buen tiro y que pueda echar una mano a la hora de subir el balón.

El primer nombre de la lista de candidatos, como ya informó este periódico en su día, es Brad Oleson. El escolta, ex del FC Barcelona, tiene toda la confianza de Joan Plaza. A sus 34 años ha finalizado su carrera en el Barça y cuenta con ofertas de Zaragoza y Fuenlabrada, más opciones de irse a Turquía y Rusia. Carlos Jiménez ya ha dialogado con los agentes del jugador, pero aún no hay una oferta formal sobre la mesa.

El motivo es que el Unicaja quiere calcular bien todos sus pasos. Oleson gusta mucho y su condición de cupo es un extra muy importante al interés que existe sobre él, ya que permitiría al Unicaja jugar con Alberto, Oleson, Díez y Suárez como cuatro cupos, sin estar «obligados» a contar para el «12» ni con Morayo Soluade ni con Viny Okouo.

Pero el nombre de Brad Oleson, según ha podido saber La Opinión, no es el único nombre de la lista que maneja el club. El Unicaja se ha interesado en las últimas horas por el escolta Sasu Salin (Helsinki, 11 de junio de 1991), de un perfil muy similar a Oleson, con buen tiro y excelente capacidad de trabajo, más joven y con más energía.

El problema es que Salin está sujeto a derecho de tanteo por el Herbalife Gran Canaria, plazo que expira el próximo 9 de julio. Es decir, si el Unicaja de verdad quiere al escolta finlandés deberá llegar a un acuerdo con él y presentar una oferta cualificada en la sede de la ACB antes de este día 9. Como hizo el pasado viernes con Shermadini. Y el Gran Canaria tendrá cinco días para igualarla. El club le puso en tanteo y dejó marchar a Kyle Kuric. El americano con pasaporte europeo apunta a Rusia. Y el Herbalife comienza a ocupar su perímetro con los fichajes de D.J. Seeley y Shaquielle McKissic, más las renovaciones de Oriol Paulí y Xavi Rabaseda, y ahora pretende a Marcus Eriksson. Así que Salin, aunque está en tanteo, no cuadraría.

El Unicaja estudia la opción y hace números, ya que es una alternativa a Oleson que gusta mucho. Al club, eso sí, siguen llegando ofrecimientos de agentes, como el del americano Billy Baron (UCAM Murcia), que tiene la virtud de poder jugar de «uno» (como hizo en el Charleroi belga). Ayer mismo quedó libre el esloveno Jaka Blazic, que no seguirá en Baskonia, también de un perfil «currante». Aunque los dos nombres del debate son Oleson y Salin.